El Grupo Vasco expuso ayer miércoles ante el pleno del Congreso las “zonas grises” que observa en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y reclamó a la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, una mayor cogobernanza en la gestión de los fondos europeos.

Durante la sesión de control, la diputada Idoia Sagastizabal exigió, una vez más, una mayor participación de las comunidades autónomas en el diseño del Plan de Recuperación. Tras definirlas como “aliadas”, y recordar que son quienes “conocen de verdad la realidad territorial, económica y social”, Sagastizabal preguntó a Calviño si tiene previsto incluir a estas administraciones en las actuaciones y reformas de la ampliación del Plan que el Gobierno español tiene que presentar en Europa.

Sagastizabal continuó su intervención criticando la indefinición de los proyectos autonómicos que se van a llevar a cabo: “En Euskadi tenemos tres: Movilidad, Terapias avanzadas y Economía del Dato. Es necesario saber si vamos a poder contar con esos fondos”, cuestionó.

Lo mismo sucede, según la diputada jeltzale, con los PERTE estatales, que “están en stand by”. Sagastizabal expuso asimismo la “frustración” de las pymes, que “desconocen el camino a seguir” para recibir las ayudas.

Por último, criticó el funcionamiento de la Conferencia Sectorial del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en la que la cogobernanza “brilla por su ausencia” y su funcionamiento no es otro que el de “o lo tomas o lo dejas, sin tener en cuenta la realidad de los territorios”.

Sobre los fondos europeos habló ayer miércoles también el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar. “Nos da la sensación de que se ha optado por un sistema de gestión de los fondos excesivamente opaco, muy enmarañado, con decisiones incluso contradictorias”, criticó. “Es una preocupación compartida por mucha más gente, no solo del PNV o de las instituciones vascas. Espero que lo corrijan”, manifestó, para admitir que “no es fácil gestionar 150.000 millones de euros en una fórmula en la que también Europa plantea sus exigencias”. Además, lamentó que no se priorice más la transformación.