Bilbao. El PNV promoverá una enmienda que permita prorrogar el actual mandato de los órganos de Gobierno de las cajas vascas. Será en el Parlamento Vasco, a petición expresa de las propias cajas de ahorro, según ha podido confirmar DEIA. Para ello, el PNV cuenta con recabar el apoyo de PSE y PP que son proclives al acuerdo.
El proyecto no tiene tintes políticos, obedece a razones prácticas, ya que la nueva Ley de Cajas se aprobará, previsiblemente, antes del 31 de julio en el Parlamento Vasco -antes de que la Cámara cierre por las vacaciones estivales- y una vez aprobada esa norma, será necesario cambiar esos órganos de gobierno a tenor de la nueva normativa. Sin esa modificación que ya están estudiando los parlamentarios vascos, las cajas deberían renovar sus órganos dos veces (la asamblea, el órgano de control y el consejo de administración). La primera, en base a la actual Ley de Cajas vigente, proceso ya en marcha que debería culminar entre los meses de marzo y abril. La segunda, una vez aprobada la nueva norma, previsiblemente tras el verano, lo que significa que, en la práctica, el mandato que ha de ser de cuatro años se reduciría a muy pocos meses.
"Hay voluntad para paralizar el proceso de renovación de las cajas hasta que se apruebe la nueva ley", confirmó ayer a este periódico Ricardo Gatzagaetxebarria, parlamentario experto en asuntos económicos de EAJ-PNV. "Estamos estudiando la fórmula para que eso sea posible, porque entendemos que es de sentido común", añadió.
Introducir un artículo Los tres grandes partidos de la Cámara vasca -PNV, PSE y PP- ya se han puesto manos a la obra para tratar de hacer posible esa petición de las cajas y darle encaje legal. Todo hace indicar que, finalmente, las fuerzas políticas acordarán la redacción de un artículo que dejará en suspenso la aplicación de la actual Ley de Cajas en cuanto a la renovación de los órganos se refiere, lo que permitirá que esos órganos solo se aprueben una vez este año y no dos, como está previsto.
Ese artículo se introducirá con toda probabilidad, según ha podido conocer este diario, en la próxima ley que se apruebe en el Parlamento de Gasteiz, ya que el acuerdo está cercano. De hecho, la próxima semana está prevista la aprobación de la Ley de la Autoridad Vasca de la Competencia y es posible que sea esa norma la que incluya ese nuevo artículo que permitirá no tener que aprobar los órganos de las cajas antes de la entrada en vigor de la nueva ley. Las negociaciones entre los partidos presentes en la cámara ya han comenzado.
Las fuentes consultadas sostienen que las cajas vascas ya han puesto en marcha los pasos previos a la renovación de sus órganos. Primero se debería restaurar la mitad de los impositores de la asamblea de cada entidad, de cien miembros cada una (en realidad, cada dos años se renuevan cincuenta miembros con la normativa vigente). Después se renovaría el órgano de control y por último el consejo de administración de cada caja. Esa renovación podría, en función de las fuerzas de cada grupo de interés, impulsar una posible renovación incluso del consejo de Kutxabank, siempre y cuando esa fuerza concreta tuviera la mayoría suficiente para hacerlo, ya que, en todo caso, son los consejos de las cajas los que promueven a los consejeros del banco recién nacido.
Las cajas de ahorros vascas buscan, con este medida, evitar los costes, económicos y prácticos, que podría suponer tener que afrontar, con muy pocos meses de diferencia, dos procesos de renovación en sus órganos de gobierno.
Ley de cajas La nueva ley promovida por el Gobierno vasco sigue su proceso en la cámara gasteiztarra, después de que la Comisión Arbitral de Euskadi acordase a primeros de mes rechazar la cuestión de competencia que planteó la Diputación de Bizkaia en relación al proyecto de ley.
Una ley que previsiblemente contará con el apoyo de socialistas y populares y que no está exenta de polémica, ya que impulsa y busca la presencia de las Juntas Generales y el Parlamento Vasco en las asambleas de las cajas en detrimento de los ayuntamientos y las diputaciones, las entidades fundadoras de las cajas. Se promueve reducir drásticamente la representación de ayuntamientos y entidades fundadoras, pero en vez del 40% como estipula el decreto-ley que debe cumplirse, su peso será del 29% -desde el 50% actual- y la nueva ley otorgará el 11% restante a Juntas Generales y Parlamento Vasco. De este modo, PSE y PP esperan obtener una mayor representación en las cajas.
En cualquier caso, la nueva ley es necesaria, toda vez que desde la aprobación del real decreto-ley 11/2010 se estableciera una sustancial reforma de la normativa básica de las cajas de ahorros.
