Bilbao. La Inspección de Trabajo sólo ha utilizado uno de los quince días de plazo que tenía para estudiar el expediente de regulación de empleo de La Naval. Ayer, justo el día en el que empezaba el citado plazo de deliberación, comunicó a la dirección y al comité de empresa del astillero la aprobación del ERE.
La decisión cogió por sorpresa a ambas partes, que, a las puertas de Semana Santa, se emplazaron a la próxima semana para definir el momento exacto del inicio de la aplicación del expediente. En cualquier caso, los representantes de los trabajadores lograron que la compañía se comprometa a no hacerlo antes del próximo lunes 12. El objetivo sindical es recolocar el mayor número posible de las personas que entrarán en el primer turno de suspensión de empleo en otras zonas de la cadena de montaje.
Esa ha sido, de hecho, la principal novedad del acuerdo final respecto al primero suscrito por comité y dirección, que el inspector de trabajo recomendó revisar el mismo día que iba a ser firmado puesto que quedaban todavía unos días de consulta. La firma se produjo definitivamente el pasado viernes.
El comité logró rebajar de 89 a 56 el número de afectados en la primera rotación del ERE. Ese personal está vinculado en su mayoría a la oficina técnica, encargada de los trabajos de diseño e ingeniería, y al departamento de administración. Los 33 que se han salvado por ahora de ir al paro temporalmente serán recolocados en otras zonas de la cadena de montaje relacionadas con la logística en algunos casos y cuestiones técnicas, en otros.
