ON los últimos retoques -se estaba colocando ya los últimos flecos un árbol de Navidad luminoso y esférico en el exterior...- el Palacio Euskalduna iba engalanándose para esta extraña de Navidad que se avecina. Serán unas fiestas distintas, de eso no cabe duda. Y sin embargo, hay proyectos que aún resisten como el First Saturday que conduce Jordi Albareda y que ayer dio sus primeros pasos con la organización de un concierto benéfico interpretado por la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS) que conmemoraba los 25 años de vida de Banco de Alimentos de Bizkaia que preside Miguel Ángel Fernandino y que ayer estaba representado en la gala por Luis Crovetto. A Jordi le echaban una mano Saioa Eibar, Itziar Rubio, Cristina García María Díaz, Olatz Campos, Ana del Ferrero y Paloma Rodrigo en la organización y al Baco de Alimentos de Bizkaia una nutrida concurrencia y el apoyo de Laboral Kutxa, con Joserra Taranco al frente, en la retransmisión en directo en streaming 360o gracias al apoyo de la entidad financiera, destinándose todos los donativos y entradas virtuales al Banco de Alimentos de Bizkaia.

El programa de mano escogido por la BOS era todo un símbolo, una llamada a la esperanza. No por nada, interpretaron la 9ª Sinfonía de Dvo?ák o del Nuevo Mundo bajo la dirección de Jordi Francés, una de las batutas jóvenes más sugerentes de la actualidad en el mundo de la dirección. La gala llevaba por título Sinfonía por un (nuevo) mundo y se diseñó como alivio para un año marcado por el dolor y también "por la esperanza de construir un futuro más humanizado", según afirmaban desde el propio Banco de Alimentos de Bizkaia, una institución a la que hay que agradecer su dedicación diaria a las personas y familias más vulnerables de Bizkaia desde 1995. Todos los beneficios, como les dije fueron destinados a su labor en la atención a un número creciente de familias necesitadas debido al impacto de la pandemia.

A la cita asistieron la diputada de Cultura, Lorea Bilbao; el director general de la Bilbao Orkestra Sinfonikoa, Ibon Aranbarri; el gerente de la Sociedad Coral de Bilbao, Iñigo Alberdi; Borja Pujol, director técnico de la BOS, Jon Ortuzar, Begoña Angisola, quien hoy lleva las riendas del Palacio Euskalduna con mano de santa, María Ángeles Ortube, Enrique Marín, Laura Bilbao, María Ángeles Elorriaga, Beatriz Marcos, Yolanda Acasuso, Begoña de Ibarra, Esmeralda Herlo, Carmen Díaz, Alicia Garmendia, Gaizka Aseginolaza, la rumana Leticia Stangulescu, Marta Fernández Rivera, junto a su sobrina Paula Fernández, María del Mar Abaroa, Encarni Domínguez, Nuria Abaroa, Lola García Ansoyate, Ana Helguera, Susana Izquierdo, María García, Ana Larizgoitia, José Luis Neyro, Marta Atutxa, Miren Olmos, Marian Gil, Ainhoa Azkarate, Izaskun Barrutia, Joseba Muguruza, Ander Bengoetxea, Idoia Salvador, María Luisa Rodríguez, Mari Carmen Hernández, José María Sánchez, Olga Aranguren, Maite del Valle, Elena Moreno, acompañada por sus hijas Ainhoa y Leire Agirre, y así un buen puñado de gente más de voluntad que quisieron sumarse a la celebración de una larga vida, nutriendo a las arcas del Banco de Alimentos de Bizkaia con toda la buena voluntad que les cabía en su corazones y un pellizquito de dirue que, como todos ustedes saben, no es alimento directo pero contribuye a que las cestas se llenen de la mejor manera posible.

El Palacio Euskalduna acogió un concierto benéfico que conmemora el 25 aniversario del Banco de Alimentos de Bizkaia

La Bilbao Orkestra Sinfonikoa interpretó la 9ª Sinfonía de Dvo?ák o del nuevo mundo bajo la dirección de Jordi Francés