Félix, Manuel, Javier y Fernando. Como es habitual en eventos de este tipo, el hamaiketako resulta esencial para poder afrontar el cocinado con fuerzas. Su apuesta: una brocheta de gamba y guindilla.

LOS vecinos de Loiu y de sus alrededores tenían ayer una cita indispensable con los fogones: el certamen de paellas de las fiestas locales. En su 15ª edición, el concurso llenó las campas situadas en la parte trasera de la plaza Aronsotegi de grupos de personas que disfrutaron de lo lindo trabajando en equipo para tratar de elaborar un arroz digno de ser premiado.

De pollo, de marisco, de verduras... una carta de lo más amplia de sabores e ingredientes para conquistar a los miembros del jurado. Y a ellos les llegaron cerca de 70 paellas que fueron las que los loiuztarras, además de habitantes de municipios cercanos como Sondika o Derio, entre otros, presentaron a un concurso que cada edición dota al pueblo un ambiente de lo más especial. Además, los diferentes equipos de cocineros y cocineras tuvieron que dar el callo para poder hacerse con alguno de los numerosos premios que ofrecía la competición organizada por el Ayuntamiento local. La paella campeona obtuvo un premio de 250 euros en metálico, por lo que, además de cubrir los gastos del día, probablemente sobró algo de dinero para celebrar la prestigiosa victoria. El grupo que logró la medalla de plata obtuvo 200 euros, seguidos por el bronce, con 150, y el cuarto clasificado, con 100. Asimismo, las paellas que quedaron entre el quinto y el duodécimo puesto también recibieron diferentes obsequios por su buen hacer con el arroz.

Pero como en todos los certámenes gastronómicos populares del País Vasco, más que el cocinado en sí, la diversión y el pasar un rato agradable ocupa todo el protagonismo, por lo que cada año el ambiente es totalmente amistoso. De hecho, hubo varios equipos de cocina que apostaron de manera más fuerte por preparar un delicioso como contundente hamaiketako antes de ponerse a cocinar sus paellas.

El buen queso, el buen vino y una agradable compañía maridaron de manera estupenda en muchos de los grupos participantes en el concurso. También hubo quien apostó por un tentempié algo menos común y, porque no decirlo, menos saludable. Es el caso de la peña Kaltzagorri de Sondika, toda una habitual en los certámenes gastronómicos de la zona. Sus torreznos de Soria aromatizaron de manera contundente las labores de cocinado de la paella que a posteriori acabaron presentando. “Aquí se viene a comer bien y a pasar un rato agradable con la cuadrilla. Siempre que podemos, venimos a los concursos de este tipo; sin ir más lejos, el pasado sábado estuvimos en Sondika cocinando sukalki. Además, en septiembre ganamos en el marmitako de Sondika así que podríamos decir que tenemos la confianza por las nubes, ya que han sido varios años en los que hemos logrado algún premio aquí, en Loiu”, admitía uno de los miembros del grupo. Al igual que la cuadrilla Kaltzagorri, fueron muchos equipos los que aportaron un sabor y un olor sensacional a las campas.

El ambiente especial en el que el municipio ha estado sumergido desde el jueves y que así seguirá durante todo el día de hoy hace de las fiestas patronales de Loiu algo especial. Ya lo dijo el periodista y presentador de televisión Edu Velasco en la jornada de presentación del concurso de putxeras del municipio: “Loiu es un pueblo muy activo y concursos gastronómicos como las putxeras o las paellas hacen ver la evolución constante del municipio. Cada vez son más las personas que se animan a este tipo de celebraciones y eso siempre es positivo”.

Kaltzagorri. Se trata de un grupo fijo en los concursos gastronómicos que se celebran en las fiestas de los pueblos de Txorierri. “Venimos de competir en el sukalki de Sondika así que ya tenemos rodaje”, admitían.

Iván, Agustín, Javier, Ander, Paco y Gonzalo. Este grupo se mantuvo un año más fiel a su tradición de participar en las paellas de Loiu, hogar de Gonzalo, ya que su compañía estaba formada por sondikoztarras.

Aitor, Aitor, Gari, Tara y Asier. Desde Derio a Loiu. Esta cuadrilla aseguraba no contar con una gran habilidad sobre los fogones, aunque señalaban que “lo importante no es ganar, sino disfrutar”.

Aitor, Igor y Kepa. Estos tres jefes de cocina de su grupo optaron por elaborar una deliciosa paella de marisco. “Estamos en verano y con la cabeza puesta en el mar y en la playa”, confesaban.