- Sin duda, habrá una gran ausencia el sábado en el regreso del concurso de guisado minero de Sopuerta. Faltará Koldo Dalmau en la campa de Santa Ana probando los platos que participan, sumando las puntuaciones y haciendo entrega de los galardones a los ganadores. Pero el impulsor del certamen, fallecido el año pasado, estará presente en el homenaje que le rendirá la organización.

“Daremos un recuerdo a sus familiares”, adelantan desde el Centro de Documentación Trueba-Encartaciones que con agentes culturales entre los que estará la asociación local Alén, en colaboración con el Ayuntamiento y comercio de Sopuerta, invitan a encender los fogones a partir de las 11.00 horas para reproducir una receta tradicional.

“Aquel cocido minero de patatas, carne y sebo se conocía en los años duros de las explotaciones de las minas de hierro” en la comarca con el nombre de “Matambres” porque ayudaba a reponer fuerzas en las extenuantes jornadas con ingredientes sencillos. “Los tiempos han cambiado y aquel simple guiso de falda, patatas y verduras se ha convertido en un auténtico manjar de la mano de las experimentadas cocineras y cocineros, artistas que consiguen preparar guisotes riquísimos y, al mismo tiempo, celebrar un día de fiesta” desde la primera edición del concurso de guisado minero, en 2009.

Para cocinar este plato se necesitan “carne de falda, verdura, patatas e imaginación”, bromean. Los candidatos se presentarán ante el jurado a las 14.30 horas en cazuelas de barro que se proporcionarán en el momento de apuntarse junto con sillas, pan y vino. Los tres primeros clasificados recibirán txapela bordada, cazuela de barro y una cesta de productos autóctonos.