De casta le viene al galgo y a Nerea Mon Laseca, actual campeona de España de Baile deportivo en la modalidad de Latino en la categoría A2 -mayores de 25 años-, la vena del baile le viene de su madre, Mertxe, bailarina de ballet clásico, quien seguro que disfrutó viendo a sus hijas Nerea primero y Edurne después danzando por su casa del barrio de Sanfuentes en Abanto Zierbena, donde reside. “A mí el baile me ha gustado toda la vida. De pequeña siempre estaba bailando, pero nunca había ido a clases hasta que un día mi tía Marijose me animó a que la acompañara a una clase de bailes de salón. Fui y era una clase de gente toda mayor y yo me dije ¡yo esto no quiero hacer!, pero luego me llevó a una competición de baile deportivo que se hizo en Etxebarri y allí vi a gente de mi edad, de unos trece años, y ahí me animé a hacerlo. Dicho y hecho... y hasta hoy”, resume esta profesora de educación Primaria en el colegio barakaldarra El Regato Ikastetxea.Desde entonces, Nerea supo que el baile iba a ser muy importante en su vida aunque reconoce que en el baile, al menos en Euskadi, las salidas profesionales pasan por las academias -como la que regenta su pareja en el campeonato, el jarrillero Jokin Mozo del Valle, o dedicarse a la competición. “Te tiene que gustar mucho, ser vocacional, porque este tipo de baile deportivo, cuando ya buscas un nivel competitivo, supone una gran inversión, tanto en la dedicación, porque exige mucha práctica y muchas horas de aprendizaje y compenetración, como en su vertiente económica porque los vestidos que usamos y los materiales, que utilizamos como zapatos, maquillajes y complementos son caros y a ello hay que sumarle los desplazamientos, alojamiento y local de ensayo”, se sincera Nerea. De este campeonato estatal la bailarina se trajo como premio -al igual que Jokin- una medalla y un diploma que sin duda dan prestigio, pero sin dotación económica alguna.

Aunque a Nerea, que ya ganó el entorchado estatal en 2016 en la categoría 1 A para menores de 25 años y el de Euskadi en 2012, la mejor recompensa fue que su familia al completo incluida su amama y su mejor amiga estuvieran presentes en la final en la que se impusieron frente a otras 5 parejas. “Y luego encima me enteré de que los alumnos del colegio siguieron en directo el campeonato y cuando llegué me habían hecho el vídeo Andereño txapeldun. Me hizo mucha ilusión”, rememora Nerea. La profesora no hace proselitismo del baile aunque reconoce que al igual que otros deportes “el baile deportivo te aporta un gran fondo físico y fuerza, y requiere de tesón y disciplina porque, aunque sea un pequeño equipo, es como un matrimonio en el que deben tirar los dos en la misma dirección y eso lleva tiempo conseguirlo”.

Atleta desde muy niña, cuando practicaba natación sincronizada y militaba en el club de Atletismo Sendoa de Gallarta, Nerea se apasiona al hablar del baile deportivo latino. “Dicen que los cinco bailes de esta modalidad están hechos para simular una historia. La samba es el descubrimiento, donde la pareja se conoce, el chachachá es donde tiene lugar la conquista, el flirteo, la rumba bolero es el enamoramiento, la pasión, el pasodoble es por así decirlo como un enfrentamiento y en el Jive es donde todo está perfecto y maravilloso y te lo pasas en grande, diversión pura”, explica Nerea. La de Abanto destaca que al final el baile “es arte en el que hay que mezclar todo: el deporte, lo artístico que es lo emocional, y el teatro porque tú estás transmitiendo una historia”.

“El baile deportivo es un arte en el que se mezcla el deporte, lo artístico y el teatro para contar una historia”

Campeona estatal de baile latino