Cita con la ecología y la solidaridad en Barakaldo

Ayer, pese al frío y la amenaza de nieve, esta iniciativa salió a la calle y se presentó en sociedad en la Herriko Plaza. Allí se llevó a cabo entre las 11.00 y las 14.00 horas una recogida de bicicletas, sillas de ruedas y componentes de ambos aparatos para que las personas que forman parte de este programa sigan aprendiendo a reparar bicicletas y sillas de ruedas entre otros. “Hemos creado un espacio abierto en forma de taller de bicis en el que trabajamos con personas en riesgo de exclusión social en el que fomentamos, por un lado, el uso de la bicicleta como medio de transporte urbano y, por el otro, ofrecemos formación en materia de reparación de bicicletas a estas personas con vistas a que, en un futuro, puedan dar una salida laboral a los conocimientos que adquieran”, señala Ekaitz Rodríguez, miembro de Biraka, una entidad que promueve el uso de la bicicleta y que, para ello, imparte talleres de seguridad vial y reparación de bicicletas entre otros.

Biraka es tan solo una de las tres patas, de las tres asociaciones que forman parte de este proyecto completamente novedoso en la localidad fabril. “Hemos encontrado la fórmula de unir intereses y causas y, con todo ello, ayudar a las personas en riesgo de exclusión a mejorar su formación y dar pasos hacia su inclusión social”, explicó Rodríguez.

Todo ello debía difundirse en Barakaldo y la forma de darlo a conocer fue la colocación de una carpa en la que, por un lado, había componentes de bicicleta y sillas de ruedas que la ciudadanía les había llevado como alguna bicicleta o silla de ruedas que, intactas, esperaban una segunda oportunidad. Entre el material que había llegado hasta los organizadores de la actividad destacaba la figura azul de una BH antigua que, a algunas personas que ya peinan canas, les traerá recuerdos de aquellos primeros pedaleos inestables, de aquellas primeras vueltas en bici por su entorno descubriendo una nueva forma de moverse por la vida. “La verdad es que este tipo de bicicletas llaman la atención de la gente y quien pasa se queda mirando y, algunos, preguntan en qué consiste esta iniciativa”, reconoce Rodríguez.

En el caso del taller que ya tiene en marcha el proyecto Lan beRdea biRzikleta eR’esilientzia, los materiales más importantes a recoger son los componentes de bicicletas y sillas de ruedas, elementos que ayudarán a llevar a cabo, por un lado, las reparaciones pertinentes y, por otro, la enseñanza a las personas que formen parte de estos talleres. Pero este proyecto tiene una doble vertiente y, por ello, la recogida de bicicletas y, sobre todo, de sillas de ruedas cuenta con un importante componente solidario. “La recogida de silla de ruedas importa porque nuestro propósito es crear una pequeña reserva de sillas de ruedas para que, en caso de que alguien pueda necesitar una, pueda acudir a nosotros para que se la facilitemos y que la devuelva cuando ya no la necesite”, explica Rodríguez.

Participación en las cuentas

Poco a poco, el proyecto va dando pasos adelante y muestra de ello la representa su inclusión en los presupuestos participativos de Barakaldo. “Para nosotros es muy importante el estar incluidos entre las iniciativas a votar porque creemos que es muy relevante a día de hoy tener iniciativas que impulsen la movilidad sostenible y la inclusión social de las personas en riesgo de exclusión”, concluyó Ekaitz Rodríguez, miembro de Biraka, una de las tres asociaciones que da pedaladas en favor de la ecología y la inclusión social en días como ayer.

“Fomentamos el uso de la bici y también la formación de las personas en riesgo de exclusión social”

Miembro de Biraka