Zalla - El Ayuntamiento de Zalla incluirá "en el presupuesto de 2020" una partida destinada a un estudio que analice la calidad del aire en el municipio, confirma el alcalde, Juanra Urkijo. La medida obedece a la inquietud ciudadana sobre la planta de biomasa cuyas instalaciones tocan también a Güeñes. En este sentido, desde Glefaran aseguran que la renovación emprendida el año pasado 2019 se traduce en una disminución de las emisiones de un 60% respecto al ejercicio de 2018, "cuando ya se situó en los niveles que la Unión Europea exige para 2024", según explica el director técnico de la empresa, Álvaro Bengoa.
El Consistorio zallarra pide que "esta cuestión tan delicada se aborde desde la responsabilidad y priorizando la salud", insiste el regidor, recordando que el informe promovido desde el anterior equipo de gobierno que se hizo público tres días antes de la sesión de investidura, "no está firmado". El nuevo análisis "no viene a sustituir a los realizados hasta ahora, pero sí pretende aclarar cualquier cuestión para seguridad y tranquilidad de nuestros vecinos y estamos de acuerdo en que se lleve un control riguroso".
En contraste con la preocupación ciudadana desde la planta de biomasa aseguran que la parada efectuada a principios de 2019 con una inversión de 1,8 millones de euros para mejorar la combustión y equipos de depuración de gases ha derivado en la reducción de las emisiones hasta una media anual tres veces menor de lo exigido por Europa, el descenso del 7% en el consumo de biomasa de restos forestales, de jardinería o poda y un aumento de la producción de energía eléctrica de un 8%
"Desde marzo no se han superado los valores máximos diarios ni mensuales y el Gobierno vasco monitoriza en continuo la emisión de partículas", señala el director técnico de Glefaran.
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