La Mancomunidad de Servicios de Uribe Kosta y Cruz Roja Bizkaia han renovado el convenio anual por el que el organismo comarcal dotará con 30.000 euros a la entidad para seguir prestando apoyo a los colectivos de la comarca que más lo necesitan. Un documento que recoge el compromiso de ambas partes por la puesta en marcha de programas de inclusión social orientados a personas mayores, infancia, juventud y personas en situación de vulnerabilidad.

El convenio estará vigente hasta el 31 de diciembre y ha sido suscrito por el presidente de la Mancomunidad, Josu Landaluze, el presidente de Cruz Roja Bizkaia, Víctor Gutiérrez y la vicepresidenta de relaciones institucionales de Cruz Roja Bizkaia, Mari Luz Palacio. Landaluze explica que el acuerdo de este año pasa de 20.000 a 30.000 euros, ya que la Mancomunidad asumirá los 10.000 euros del alquiler del local que hasta ahora abonaba el Ayuntamiento de Sopela.

El presidente de Cruz Roja Bizkaia, Víctor Gutiérrez, agradece el esfuerzo realizado para que este año se vuelva a renovar este acuerdo a través del cual se potencian multitud de actividades de manera conjunta. Concretamente, la entidad desarrolla en la comarca de Uribe Kosta el Plan de Intervención Social cuyo objetivo es abordar las distintas dimensiones del fenómeno de la exclusión social desde un enfoque integral a través de una estrategia marco para la inclusión.

"Trabajamos con aquellas personas y colectivos que por distintas razones se encuentran en situación de vulnerabilidad, como son las personas mayores, infancia y juventud, mujeres, personas enfermas o con diversidad funcional, personas refugiadas, inmigrantes... Nuestro trabajo consiste en reforzar sus capacidades para reducir su vulnerabilidad y trabajar, de ese modo, su integración en la sociedad", señala Gutiérrez. En concreto, en Uribe Kosta se desarrolla un programa de atención a colectivos vulnerables que consta de varios apartados. Por un lado, el proyecto de atención a personas a en situación de vulnerabilidad y de respuesta ágil a distintas situaciones y colectivos y ofrece ayudas para el pago de suministros vinculados con la pobreza energética. Asimismo, también se acompaña a las personas en su proceso de incorporación en el sistema de protección social. "Si fuera necesario los voluntarios acompañan a aquella persona que lo solicite cuando presente algún tipo de problema social, cultural, físico, etc.", explican. También se ofrece asesoramiento jurídico en materia de extranjería y se trabaja para la promoción del éxito escolar a través de un proyecto de acompañamiento educativo a niños y niñas de familias en situación de vulnerabilidad donde se realizan distintas actividades, dos días por semana, con el objetivo de adquirir habilidades teóricas, personales y sociales de los niños y niñas en dificultad social. Para ello, se les apoya en la realización de tareas; productos para la infancia de campañas puntuales: material escolar, desayunos y meriendas y juguetes, además de la ayuda al envejecimiento activo con talleres de manualidades, gimnasia, préstamo de ayudas técnicas, servicio de alquiler de sillas de ruedas...