Tapones para Sanfilippo. En la actualidad hay siete casos constatados en Euskadi de esta enfermedad. Uno en Gipuzkoa y seis en Bizkaia, tres de ellos hermanos. A nivel estatal se elevan a 70 los casos que se conocen. Inmersa en la lucha contra este síndrome se encuentra la Asociación Vasca Sanfilippo, que desde diciembre de 2013 trabaja junto con la Fundación Nacional Stop Sanfilippo y el Hospital Universitario de Cruces para encontrar una cura y dar a conocer esta enfermedad en Euskadi. Con el objetivo de colaborar con su titánica lucha, el Ayuntamiento de Sopela ha instalado cuatro contenedores especiales para la recogida solidaria de tapones de plástico.

Los contenedores, personalizados y de color gris, se ubican en el Ayuntamiento -frente de la oficina de turismo-; en Larrabasterra -en la plaza Urgitxieta, al lado de la oficina de la Mancomunidad de Uribe Kosta-; en Arrietara -en el cruce entre las calles Solondota y Arrietara, a la altura del bar Indian- y en Atxabiribil -al lado de los contenedores soterrados y de la parada de autobús-. Se trata de una iniciativa con la que, además de contribuir al cuidado del medio ambiente, se pretende "que los vecinos y vecinas puedan aportar su granito de arena a diversas causas solidarias", explican desde el Consistorio sopeloztarra.

"Se busca generar un hábito de reciclaje, aunando dos valores importantísimos, la concienciación medioambiental y la solidaridad", agregan.

Recogida De esta manera, la recaudación que se obtenga con la recogida de los tapones se destinará "a personas y colectivos desfavorecidos o proyectos solidarios", explican. En concreto, el dinero recaudado en esta primera recogida "irá destinado a la Asociación Vasca Sanfilippo, formada por familiares y amigos de niños y niñas con el síndrome de Sanfilippo en Euskadi", apuntan.

En los contenedores se podrán depositar tapones o tapas de plástico procedentes de distintos artículos de uso doméstico como, por ejemplo, "de botellines de agua, refrescos, gaseosas, yogures, tetrabriks, botes de café, chocolate, cacao, crema de cacao, aceite, envases de nata en spray, perfumes, colonias, etc.

Por último, la recogida correrá a cargo del Ayuntamiento para posteriormente "trasladar el material a una planta de tratamiento y recuperación de plásticos ubicada en Lemoa", concluyen.