Sin romería, ni el tradicional aurresku del alcalde de Bilbao en la parte trasera de la basílica de Begoña. La pandemia del coronavirus obligará por segundo año consecutivo a suspender los actos que tradicionalmente se desarrollan en la festividad de la Virgen el 15 de agosto.

Sin embargo, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto no faltará a su cita con la Amatxu y asistirá a la misa mayor que se celebrará a las 12.00 horas en el templo. Además será la primera eucaristía oficiada en esta festividad por el nuevo obispo de Bilbao, Joseba Segura, y, contará con las restricciones sociosanitarias y de aforo impuestas por la actual situación de pandemia.

Aburto, cumplirá este domingo con la tradición de representar al Ayuntamiento en la misa que se celebrará en la basílica de Begoña. Por segundo año consecutivo, debido a las restricciones sociosanitarias derivadas de la actual situación de pandemia por COVID-19, el acto no incluirá la romería popular ni el tradicional aurresku que el primer edil de la villa suele dedicar a las personas congregadas en el entorno del templo.

El oficio religioso del Día de la Amatxu, con las correspondientes medidas de higiene y restricciones de aforo en el interior de la basílica de Begoña. Además, quien quiera asistir a alguna de las ocho eucaristías previstas a lo largo de la jornada, deberá concertar cita previa a través de la web www.bizkeliza.org.

El año pasado, debido a la pandemia de coronavirus, el Ayuntamiento de Bilbao, en coordinación con el Obispado, decidió suspender el tradicional aurresku de Begoña y la romería popular que se celebra cada 15 de agosto, medida que se mantiene también este año para evitar aglomeraciones que faciliten la propagación del coronavirus.