Más de 2.800 familias de Bilbao reciben ayudas para rehabilitar sus viviendas

El Área de Regeneración Urbana del Ayuntamiento de Bilbao promovió más de 18 millones de inversión privada en obras de rehabilitación en edificios y viviendas en 2020 a través de la sociedad municipal Surbisa. Se trata de un 60% más que el año anterior, al pasar la inversión generada de 11,6 millones en 2019 a 18,7 millones en 2020.

Por zonas, Casco Viejo y Bilbao La Vieja son las áreas de intervención que más intervenciones y ayudas de subvención han generado, con un total de 7,2 y 5,7 millones de euros respectivamente. En total, más de 2.855 familias de Bilbao se han visto beneficiadas en la realización de las obras de mejora de sus edificios y viviendas a través de ayudas y subvenciones, 963 más que en 2019.

Estas son algunas de las cifras que se desprenden del balance de Surbisa del año pasado y de su impacto en la ciudad. "Nuestra labor de mediación, asesoría, acompañamiento y ayudas económicas ha permitido que las subvenciones tramitadas y aprobadas, tanto de Gobierno Vasco como nuestras, asciendan a 4 millones de euros y hayan movilizado una inversión privada de más de casi 19 millones de euros. De esta manera, en el Área de Regeneración Urbana a través de Surbisa seguimos apostando por la rehabilitación y cohesión de los barrios más desfavorecidos, así como por la mejora de los entornos y conjuntos de edificación singulares", explica Nora Abete, concejala de Regeneración Urbana del Ayuntamiento de Bilbao.

El apoyo se canaliza de distintas maneras. Destacan las ayudas para la conservación y seguridad de edificios y viviendas, con 1 millón de euros; les siguen la accesibilidad y eficiencia energética con 560.000 euros; y, por último, las ayudas a familias en situación de vulnerabilidad, que han sido de 488.000 euros.

A todo esto hay que sumar los 500.000 euros de la primera convocatoria del Plan Renove de Vivienda para la realización de obras en interior con la finalidad de mejorar en calidad, confort y eficiencia, por una parte, y, además, promover la actividad de las empresas, gremios y profesionales del sector de las reformas y obras a fin de apoyar el mantenimiento o creación de puestos de trabajo es este sector tan afectado por la pandemia.

"Forma parte del ADN de Surbisa la incentivación de la realización de obras de rehabilitación mediante el acompañamiento técnico-social y la concesión de ayudas económicas, siempre con el acento puesto en las personas en situaciones más desfavorables, y en implementar su calidad de vida", recalca Nora Abete.

Intervención en comunidades

Además de conocer la situación y el estado de la edificación de sus zonas de intervención, Surbisa realiza un acercamiento a la realidad de las personas residentes y a las relaciones que se establecen en las comunidades vecinales. El año pasado realizó 220 intervenciones destinadas a la mejora de la cohesión social y la convivencia, no sólo para alcanzar acuerdos -en relación a diversas facetas de la rehabilitación-, sino también para mejorar y/o alcanzar la necesaria convivencia para el buen uso y mantenimiento de los espacios comunes.

Las más frecuentes han sido el apoyo en las reuniones de comunidad, los casos de acción social, y el apoyo a la vulnerabilidad y morosidad.

Todo ello redunda en el aumento de la calidad de vida de las personas residentes en los edificios y barrios en los que Surbisa actúa. Así, se genera un sentido de pertenencia que sienta las bases de convivencia pacífica, que favorece la cohesión social y solidaria que todo proceso rehabilitador debe buscar.

35 años de Surbisa

El 2020 también fue para Surbisa el año de su 35 aniversario. La sociedad municipal para la conservación del patrimonio de Bilbao nació en 1985 para recuperar el Casco Viejo, asolado por las inundaciones ocurridas dos años antes aunque, desde 2005, puede actuar en toda la ciudad en orden a las prioridades de deterioro físico y social.

De hecho, desde su creación, Surbisa ha incentivado actuaciones en más de 40.000 edificios y viviendas privadas de la ciudad, un 15% de todos los edificios existentes en la Villa. Como consecuencia, Surbisa ha movilizado una inversión privada que supera los 278 millones de euros en estos 35 años, y, además, ha apoyado esas intervenciones con 76 millones de euros de ayudas económicas propias y del Gobierno Vasco.