Aste Nagusia late más allá del Arenal. Incluso más allá de Abandoibarra, la Plaza Circular y Ledesma. Hasta en Indautxu, El corazón de esa manera de vivir la Semana Grande es el Ercilla. Antes, en sus salones. Desde hace unos años, tanto en la soberbia jaima que levantan los Martínez Anasagasti en la placita frente al hotel, como en la animada terraza de la azotea.

Ayer bullía ya la carpa a la hora del aperitivo. En uno de los extremos de la barra se acodaba el cocinero jefe del restaurante Nerua, que abre sus puertas bajo el Guggenheim, Josean Alija. En eso llegó Inaki Antón, Uoho, guitarrista de Platero y tu o Extremoduro. Un referente del rock&roll. “He venido porque me ha llamado Josean”, bromeó. “¿Qué hay mejor que hacer en Aste Nagusia que salir con los amigos a tomar algo?”, se preguntaba el cocinero acreditado con una estrella Michelin. “Tenemos una adolescencia compartida, con sus momentos y circunstancias”, aseguró el chef, uno de cuyos viejos alias es El Heavy. “Nos conocimos en el Umore Ona”, añadió Alija, en referencia al mítico bar rockero de la calle Sendeja. El talento atrae al talento.

En el otro extremo de la carpa Olatz de Santiago, Gotzone Pardavila, Chus, María y Laura Lizarraga, Borja, Gonzalo y Javier Pradere y Gorka Larrucea charlaban animadamente con sus pañuelos de fiestas al cuello. Sorpresa: la mayoría son de Donostia, aunque parte residan en el Botxo. “Los estamos trayendo poco a poco”, comentó con una sonrisa Borja Pradere. Añadió Chus Lizarraga que la “Semana Grande de verdad es la de aquí” en referencia a alguna otra del mismo nombre. Y concluyó con un “en Bilbao siempre estamos bien”. Eso si, la Real es la Real.

El chef con estrella Michelin Josean Alija quedó en la carpa del Ercilla con un viejo amigo, el reconocido músico Iñaki ‘Uoho’

En una de las mesas del centro de la jaima, la familia Martínez Anasagasti, propietaria del Hotel Ercilla, picaba alguna delicatessen. Cayetana, a quien acompañaban su marido, Álvaro Echevarría, y sus hijos, Cayetana y Martín, pronostica una “Semana Grande muy fuerte, sobre todo a partir del jueves”. Apostilló que, en lo que al ambiente del hotel se refiere, “los toros mandan”. Es seguro que su hermano, David Martínez Anasagasti, que conversaba con unos conocidos a un par de metros de distancia, comparte el vaticinio.

Como para dar la razón a la hostelera, se encontraban muy cerca, en torno a una de las rústicas mesas altas, Mar y Juanjo Rosco, de Montánchez, Cáceres, madre y tío respectivamente del novillero David Gutiérrez. El espada se jugaba ayer por la tarde, con otros cinco matadores, el pase al mano a mano final que dirimirá al ganador del IV Memorial Iván Fandiño. El mano a mano se celebrará a las 11.00 de la mañana del próximo viernes 22 de agosto. Ayer, Mar y Juanjo tomaban algo en compañía de su paisano Iván Galán y el bilbaino Pablo Ibarrondo. Mientras unos deseaban que David se plantara en la final del memorial, la madre repetía la frase “que luego salga de la plaza igual que entre”.

René, Gonzalo de Miguel, Txa Argumedo y Alfonso Andía llevaban menos tensión en el cuerpo. Y eso que su hoja de ruta incluía leones en lugar de toros. Unos leones que últimamente están abonados al estrés. El plan consistía en un aperitivo en la jaima, irse a comer al txoko, concretamente el de la cercana Peña Juvenil del Athletic, y digestión en San Mamés. Marijaia se hubiera apuntado sin dudarlo un segundo.

Idéntica previsión era la que pensaban poner en práctica los santurtziarras, y socios rojiblancos, Juanjo Ornes, José Luis Ortiz y Agri Proaño, solo que cambiando el txoko por un restaurante de Simón Bolívar.

Cayetana Martínez Anasagasti espera una gran afluencia al hotel durante Aste Nagusia a partir del próximo jueves

Iratxe Lasa, Ana Moreno y Elena Eguskiza, las tres luciendo gafas de sol muy fashion, irían después a testar el ambientillo de Semana Grande a la remozada calle García Rivero. También optaron por el ambiente del Ercilla, entre tras muchas personas, Óscar del Hoyo, Enrique González, José Gondra o el periodista bilbaino radicado en Madrid, Iñigo Corral.

Dentro del hotel, ya es visitable la exposición pictórica con retratos de toreros firmados por el artista José Luis Pérez de León Pachucho. Colores planos y líneas gruesas constituyen las señas de identidad de su personal estilo.

La recepción parecía invadida por un numeroso grupo de matrimonios, muy probablemente británicos o norteamericanos, y sus desproporcionadas maletas. Lo miraban todo con gesto de interés y ligera sorpresa. ¿Sabrían que habían aterrizado en plena Aste Nagusia o partirían pasado mañana convencidos de que en Bilbao todos los días son así?

Hacia Licenciado Poza se escuchaban cánticos sevillistas, olía a bengala encendida y abundaban camisetas del Athletic de todos los colores, alguna del Betis y bastantes del club del Pizjuan. Una la vestía la televisiva Reyes Prados.

Así transcurrió en Indautxu una jornada de Aste Nagusia que amaneció con panza de burro en el cielo y melena de león en la cabezal