Doce horas antes de la bienvenida oficial al 2025, la plaza Arizgoiti de Basauri se quedó pequeña para la celebración de las campanadas infantiles, un exitoso acto organizado desde 2019 por la Asociación de Comerciantes “porque nos dimos cuenta de que los niños y niñas, sobre todo los más txikis, no podían disfrutar del momento especial e importante de la llegada del nuevo año porque muchos, a las doce de la noche, después de estar jugando todo el día, acababan reventados”, explicaba poco antes del inicio del evento el presidente de la agrupación, José Feijoó.
De ahí surgió la idea “de darles la oportunidad de vivir esta tradición de otra manera y con un festejo hecho a su medida”. La pandemia frenó en seco la iniciativa, pero una vez retomada en 2021, la cita se considera ya asentada en el programa de Navidad de Basauri y cada año supera todas las expectativas y previsiones. En 2023 se repartieron 3.500 kits con 12 gominolas de la suerte y manos clackers castañuelas “y nos quedamos cortos, así que para esta ocasión hemos subido la cantidad a cuatro mil unidades”.
Desde las 11.00 horas
El reparto de esos kits dio comienzo a las 11.00 horas con el sonido de fondo de la música y la animación de un DJ. Poco a poco empezaron a llegar aitas y amas con sus hijos, amamas, aitites, cuadrillas de amigos... Muchos de ellos incluso con llamativas y brillantes pelucas, gorros de Papá Noel o divertidas gafas con la forma de 2025 como montura. A pesar de la fría temperatura en las zonas más sombrías de la plaza, el ambiente se fue calentando a medida que pasaban los minutos y se acercaba la hora de las campanadas. Desde megafonía daban instrucciones a los asistentes: “Cuando den las doce empezaremos a tomar, una a una, las gominolas, pero con tranquilidad. Vamos a dar varios segundos entre una campanada y otra. No queremos que nadie se atragante por las prisas”. Y desde el escenario, el DJ también solicitó a todos los asistentes levantar las manitas de plástico “para dar un merecido aplauso” a la Asociación de Comerciantes de Basauri “que logra abarrotar esta plaza con este bonito acto”.
Tras ese agradecimiento llegó el esperado: “¡bat, bi, hiru, lau, bost, sei, zazpi, zortzi, bederatzi, hamar, hamaika eta hamabi!”. Una lluvia de confeti inundó en ese momento la plaza Arizgoiti mientras de fondo sonaba el Merry Christmas de Mariah Carey y después el archirepetido El burrito sabanero. La alegría se desbordó en pleno centro de Basauri para dar la primera bienvenida a 2025 con un adelantado cotillón de Nochevieja para los niños, pero del que también disfrutaron los mayores. Y la música, la fiesta y la animación se extendieron en la plaza Arizgoiti hasta pasadas las 13.30 horas.