Como cada 4 de julio, la villa de Elorrio rindió tributo a San Valentín de Berriotxoa, copatrón de Bizkaia. Sin el tradicional paseíllo previo a la misa mayor que dejó de realizarse el año pasado, “para separar la política de lo religioso”, explicaron desde el equipo de gobierno, la basílica de la Purísima Concepción congregó a numeroso público. No en vano, la misa de mediodía estuvo oficiada por el obispo de Bilbao, Joseba Segura, y asistieron la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe; la exalcaldesa de la villa y actual presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otaduy, y el parlamentario y concejal elorriarra, Mikel Arruabarrena, entre otros representantes institucionales.
Como una tradición más, tampoco faltó el puesto instalado en la entrada de la basílica para comprar pulseras, llaveros, pastilleros, dedales o las tradicionales rosquillas, mostachones y lenguas de gato elaboradas por las monjas de Santa Ana. “Nosotros les ayudamos con las ventas y los beneficios son para ellas. Lo que más triunfa es la repostería porque la mayoría de la gente que viene son del pueblo y ya tienen los artículos de Valentín. Son monjas de clausura y ahora están once viviendo en el convento. Este día está apuntado en rojo en calendario; siempre hay buena respuesta. También es verdad que se nota cuando cae en fin de semana o en día de labor como ha tocado este año”, comentó la voluntaria elorriarra Toñi Grande, que aparcó sus vacaciones en Cáceres para estar presente en la celebración.
De cara al fin de semana continuará la programación. El sábado y el domingo, durante todo el día, se disputarán en el frontón de la plaza las finales de los campeonatos de pelota, pala y frontenis, organizado por el club de pelota Hori-Hori. La mañana del domingo el protagonismo será para la feria ecológica, organizada por Elorrixa Ekologia Taldea.