La Diputación de Bizkaia solo ha contratado desde 1985 con una de las seis grandes constructoras de infraestructuras que fueron multadas el pasado julio con 203 millones por la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC), por alterar durante más de 25 años el proceso competitivo en las licitaciones de construcción de infraestructuras.

En una comparecencia en las Juntas a petición del PP, el diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, ha señalado que "únicamente" Sacyr ha hecho trabajos para la Diputación. Esta empresa tuvo seis contratos entre los años 2007 y 2012, en solitario o en UTE con otras compañías, por un total de 184 millones de euros, entre ellos la construcción de la variante de Igorre, algún tramo de la Variante Sur Metropolitana o los túneles de Autzagane.

Para Pradales, esos 184 millones de euros son un cifra "residual", ya que solo representa el 1,23% de los 15.000 millones invertidos en infraestructuras por la Diputación desde 1985.

Por ello, ha destacado que en Bizkaia "no se han dado esas malas prácticas, sino buenas prácticas" en la contratación de obra pública y se "demuestra que aquí las cosas las hacemos de otra manera y que los controles existen".

"Afortunadamente hay una gran competencia en la mayoría de licitaciones" de la Diputación y "ha habido competencia libre porque había otros oferentes locales".

Pradales ha recordado que la multa de la CNMC ha sido recurrida ante la Audiencia Nacional y que las empresas afectadas no tienen "suspendida" la posibilidad de presentar ofertas en las licitaciones públicas.

El diputado ha afirmado que el Gobierno foral va a seguir aplicando el "rigor, la vigilancia y las medidas de control que sean necesarias, algo que debe estar en nuestro ADN cada vez que hablamos de una licitación de dinero público".