Es bastante habitual que alumnos de una determinada generación o de curso de tal o cual centro escolar o empleados de una empresa se reúnan al cabo de un tiempo para celebrar un encuentro nostálgico con los excompañeros de aula, de pupitre, de patio o de taller u oficina. Lo que ya no es tan habitual es que sea la historia del propio centro, en este caso educativo, la que motive que alumnos de varias generaciones y cursos se citen para revivir las experiencias vitales que sucedieron a lo largo de los años al calor de aquellas aulas.
Ese es el caso del Colegio Público San Gabriel, ubicado en el barrio del mismo nombre en Trapagaran, que en este curso cumple 40 años desde que abriera sus puertas en 1979 a los alumnos de 1º de la EGB. “Este curso se conmemora el 40 aniversario de la inauguración de nuestro colegio San Gabriel y con ese motivo hemos conseguido, con el apoyo de la actual dirección del centro y del Ayuntamiento de Trapagaran, que el próximo día 9 de noviembre, sábado, tengamos una jornada de puertas abiertas en horario de 11.00 a 13.00 horas donde todos los exalumnos y exalumnas, hermanos y demás familiares... Todos los que hayan cursado en algún momento en el cole, serán bienvenidos”, señala Javier Conejo, exalumno de 1979, que junto con un grupo de compañeros ha decidido poner en marcha este encuentro en el que contarán con la presencia de quien fuera nuestra primera profesora quien se acercará a Trapagaran desde la ciudad aragonesa de Calatayud donde reside.
Ana Mari Gómez “Hemos contactado también con el que fuera el director de ese primer curso pero está sin confirmar su asistencia como sí hemos hecho con Ana Mari, quien estuvo en el colegio apenas dos cursos porque luego obtuvo plaza en Aragón”, anuncia Javi Conejo, quien plantea el reencuentro como una oportunidad “donde podremos charlar un rato, hacernos fotos, recordar viejos momentos... Además, el colegio nos abrirá las puertas de las aulas, que podremos visitar”, añade Javier, que comenta que este iniciativa, a pesar de llevar poco tiempo en marcha “ha generado una gran expectación entre la gente que estudió allí. Nunca se sabe pero lo mismo podemos encontrarnos allí ese día 30 personas que 300 ya que no hay un programa de actividades previsto con un listado de asistencia. Es algo más informal, un acto de encuentros entre antiguos alumnos y la nueva dirección. Ojalá desde el centro puedan animarse para en esta fecha señalada apoyar la celebración de algún acto más elaborado”. De momento, tal como apunta Javier, “algunos padres llevarán o llevaremos a nuestros hijos para que escuchen de nuestra propia voz cómo era la educación hace 40 años y cómo es ahora”.