Bilbao - Las obras de la segunda fase del nudo de Kukularra comenzarán este verano, con la construcción de un nuevo paso, bajo el actual ramal desde La Avanzada, para evitar los trenzados de los vehículos que, desde Leioa y Rontegi, quieren dirigirse hacia Enekuri o el Txorierri. Los trabajos, que darán continuación a las actuaciones ya ejecutadas en la zona y que únicamente están a falta de los últimos remates, se prolongarán durante 21 meses y tendrán un coste de algo más de 10 millones de euros.

Las obras del enlace de Kukularra son una de los principales actuaciones que está llevando a cabo la Diputación para descongestionar las retenciones y los cuellos de botella que se producen en todo el entorno, tanto en La Avanzada que atraviesa Leioa en dirección a Bilbao como en la salida del puente de Rontegi y el inicio del corredor del Txorierri. Se trata de uno de los enlaces más críticos de la red viaria metropolitana, al conectar esos tres grandes ejes radiales, por el que circulan más de 135.000 vehículos al día. Según los cálculos de la Diputación, la congestión del enlace supone que en días laborables se vean afectados por estas retenciones 6.000 vehículos en La Avanzada -donde la hora punta se prolonga durante casi tres horas- y otros tantos en Rontegi. Con una ocupación media de 1,2 personas por vehículo, casi 15.000 conductores se ven diariamente afectados por los atascos que se producen en esta zona.

El principal problema en el enlace de Kukularra son los trenzados de tráfico que se tienen que hacer entre los vehículos que llegan desde La Avanzada y Rontegi, y que quieren dirigirse a Enekuri o el corredor del Txorierri. Los conductores procedentes de Leioa, que se incorporan a la carretera desde la izquierda, tienen que atravesar todos los carriles para salir hacia Bilbao, cruzándose con los que llegan desde Ezkerraldea por la derecha y quieren seguir hacia el Txorierri. Estos cruces ralentizan de forma importante el tráfico, sobre todo en hora punta.

La ambiciosa actuación se ha dividido en dos fases, tanto por una cuestión de disponibilidad presupuestaria como por las considerables afecciones en el tráfico que implica actuar en un nudo ya de por sí complicado en el que se tiene que mantener en todo momento el tráfico, uno de los más elevados de la red metropolitana.

Una vez concluidas las obras de la primera fase, este mismo verano se acometerán los trabajos previstos en la segunda, que incluirá el desdoblamiento a dos carriles del tramo final del ramal de La Avanzada a Kukularra, la construcción de un nuevo vial de Rontegi a Kukularra por debajo del que llega desde La Avanzada y, finalmente, el desdoblamiento completo del ramal de La Avanzada a Kukularra.

Dos carriles desde La Avanzada Para terminar con los trenzados de tráfico se llevarán a cabo varias actuaciones. Por una parte, se construirá un paso inferior, por debajo del ramal que llega desde La Avanzada en dirección al Txorierri, de forma que los vehículos que desde Rontegi quieren seguir hacia Derio se incorporarán al corredor a través de los dos carriles de la izquierda. Este paso partirá desde la propia bifurcación hacia el Txorierri y Enekuri, actualmente ya con dos carriles. Los conductores que quieran continuar hacia Enekuri seguirán tomando el carril actual, al que únicamente se unirá otro que llegará desde La Avanzada.

El ramal que llega desde Leioa también se va a ampliar de uno a dos carriles: uno para los vehículos que sigan por el Txorierri y otro para los que se vayan a desviar a Enekuri. Así, la zona donde actualmente se trenzan los tráficos contará con cuatro carriles: los dos de la izquierda para los conductores que han llegado desde Rontegi por el paso subterráneo, el tercero para los vehículos que siguen hacia el Txorierri desde La Avanzada, y un cuarto, el más a la derecha, que compartirán los que se dirigen hacia Enekuri.

Para la ejecución de los trabajos se intentará minimizar las afecciones al tráfico, aunque se tendrán que reducir carriles y estrecharlos en algunos momentos para permitir trabajar a las máquinas.

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