El torreón del Serantes estará listo para Kornites

Santurtzi - El monte Serantes no es solo el gran pulmón natural de Santurtzi, la atalaya desde la que divisar la localidad marinera y toda la comarca de Ezkerraldea. En esta cima de 458 metros de altitud también se ubica la historia del municipio, un pasado a no olvidar. En este sentido, ayer comenzaron las obras de recuperación de la estructura de uno de los iconos de la cima santur-tziarra: el torreón. Las obras cuentan con un presupuesto de 230.000 euros y se extenderán durante cinco meses, no permitiéndose el acceso a la zona, para evitar daños, durante el periodo de las mismas.

En la actualidad el torreón se encuentra en estado de ruina, habiendo perdido la techumbre, varias de las paredes han comenzado a desmoronarse y abundan los escombros acumulados al pie de la fortificación. Además, faltan en los muros muchas piezas de sillería que han sido sustraídas. De ahí que, en algunos puntos, los muros estén descalzados y agrietados con peligro de derrumbe.

A pesar de todo, el torreón conserva cerca del 80% de sus muros y por ello “se encuentra en el momento decisivo para restituir sus partes perdidas”, tal y como señala la alcaldesa de Santurtzi, Aintzane Urkijo.

El torreón tiene una superficie construida de aproximadamente setenta metros cuadrados, y una altura por encima de los 6,5 metros y a principios de 2014, se acometió un refuerzo puntual en la esquina norte, mediante un cosido con llantas metálicas, para impedir que los muros noreste y noroeste siguieran abriéndose en este punto. Para la recuperación del torreón, se ha planteado una intervención con dos naturalezas diferenciadas: la rehabilitación de lo existente y la construcción de una estructura nueva en su interior.

Es por ello que el proyecto se plantea también, en estas dos fases. La idea es dar acceso al torreón e intentar recuperar la volumetría original. Para ello, “primero es necesaria la rehabilitación de los muros existentes y, a continuación, la construcción de una estructura interior de acero para poder acceder al torreón y alcanzar la azotea”.

Entre los trabajos a realizar están el desbroce y limpieza de la zona y desescombro del espacio interior del torreón, así como el acondicionamiento, estabilización y conservación de la estructura, y ya en la parte interior se colocarán dos escaleras de un tramo cada una, para acceder del espacio exterior a pie del torreón hasta la puerta de acceso en planta primera por una parte, y para acceder a la plataforma superior desde la planta primera por otra.

Por último se plantea la iluminación del torreón, mediante un sistema de luminarias proyectores rotacionales, que hagan que la fortificación se vea de noche, funcionando así como referencia desde la distancia. “Tenemos la oportunidad de recuperar parte de nuestra historia y ahora es momento de hacerlo, por lo que para la próxima festividad de Kornites, podremos volver a ver el torreón como lo fue originariamente. Podremos entonces disfrutar de nuestro patrimonio y recuperar así un poquito más de nuestro pasado”, concluye Urkijo. Una vez realizado el proyecto arqueológico (6.900 euros), la fase de recuperación de muros conllevará una partida de 89.000 euros y la de accesibilidad y puesta en valor, más de 107.000 euros (todas las cantidades, más IVA).