BARAKALDO será testigo de la apertura de la primera escuela de música gospel en Euskadi de la mano de la academia de música Arteta y el compositor catalán especializado Ramón Escalé.
Todo se remonta a hace unos pocos meses atrás cuando Ramón, también un conocido pianista, se vio en la necesidad de trasladar al territorio vasco su conocimiento sobre el góspel, un género musical en el que lleva sumergido hace ya más de 15 años.
La música góspel, esos cánticos espirituales y religiosos que surgieron de las iglesias afroamericanas en el siglo XVIII y que se hicieron populares durante la década de 1930, son reconocidas en todo el mundo.
Con el bagaje de los múltiples cursos que ha impartido este profesional, aterrizó el pasado mes de marzo en Bizkaia para ofrecer un clase magistral de góspel en Barakaldo con la ayuda de la academia Arteta. “Doy muchísimos talleres por diferentes lugares pero la respuesta aquí fue totalmente excepcional, vi a las personas que acudieron con muchísimas ganas de seguir aprendiendo, involucrándose a tope y también con mucha ilusión”, expresa Escalé a DEIA.
Por ello, no dudó en lanzarse de lleno en esta nueva aventura de crear una escuela de este género en Barakaldo en la academia musical Arteta, para ofrecer su conocimiento y transmitir “todo lo que es realmente el Gospel”.
Susana Arteta, la gerente de la academia barakaldarra, sigue sin poder asimilar el acontecimiento que va a vivir a partir del próximo mes. “Es una gran innovación, pero es precisamente eso lo que hay que hacer en la música; renovarse culturalmente y este es momento el preciso para dar un paso hacia adelante”, destaca. Al igual que sus dos hermanas, Belén y Marta, que también forman parte de la academia, y “a pesar de ser nuevas en el mundo del góspel”, sus ganas de estar al mando del proyecto, hablan por sí solas; unas intenciones muy visibles como también lo es la confianza plena que depositan en Escalé.
Por eso, las dos partes involucradas en este pionero proyecto en Euskadi están expectantes sobre la respuesta que obtendrán ante la apertura de la escuela. Desde Arteta confirman que algunas personas que viven en Gipuzkoa y que aman todo lo que gira en torno a este tipo de expresión de voces negras ya les han expresado sus ganas de acudir.
“Todavía no hemos abierto las preinscripciones pero ya nos han confirmado que van a estar en el curso”, afirman. De hecho, que haya tanta expectación ante este proyecto para el compositor es “un privilegio” porque “poder hacer lo que realmente me apasiona es muy importante”.
Algo que el compositor y futuro dirigente a distancia de la academia -reside en Cataluña, donde está la primera escuela de góspel del Estado- tiene claro es que no es necesario cantar bien para inscribirse en la escuela. “La voz es un instrumento que llevamos encima y cualquiera que tenga voz también puede cantar”, asegura Escalé. De hecho, a su juicio, lo básico sobre la música “es que está para disfrutarla”. Por ello opina que la nueva escuela de Barakaldo será un buen punto de partida la promoción de este estilo de música tan conocida por las películas de Hollywood y la pasión que ponen sus interpretes en los altares de las iglesias.
Los promotores creen que es un buen momento para empezar a impartir junto al curso workshops, organizar conciertos y master class entre otras cosas. Realmente, este profesional ve “muchísimas posibilidades” para este nuevo centro de Barakaldo porque la pasión y el sentimiento es importante para estos proyectos, algo que asegura que los vascos tienen por la música.
Sin embargo, admite estar “un poco” a la expectativa sobre el futuro del centro. “La realidad será la encargada de decidir el futuro de este proyecto”, opina el pianista.
Por ello, en menos de un mes se presentará oficialmente este proyecto en la asociación Clara Campoamor, en el barrio barakaldarra de San Vicente.
El viernes 8 de septiembre habrá una jornada de puertas abiertas donde podrá acudir cualquier persona que le interese conocer los cursos y también tendrá la opción de rellenar el formulario para inscribirse en la escuela. Al día siguiente, el sábado 9, se realizará un casting en la escuela de música Arteta para escuchar las voces y poder seleccionarlas en las diferentes tonalidades. Tanto Susana como Marta lo tienen claro. Quieren formar parte del coro senior, porque la música es algo que llevan en la sangre, que es parte de su vida y de su familia. El proyecto es todo un reto para ellas pero, en definitiva, es algo que afrontan con ganas e ilusión porque “es totalmente lo” lo que necesitaban para renovarse.
Cantar a voces El góspel tradicional, el que proviene de Estados Unidos, está ligado a la religión. Pero las dos partes involucradas en este proyecto no quieren acotarlo solo a ese enfoque. Lo principal, según Arteta, es atraer este género musical a todas las personas. “Cualquiera puede cantar creyendo en lo que sea, pero aquí vamos a enseñar en que el góspel no es solo una religión”, admite. Consiste cantar a voces, en armonía, entonando pero “sobre todo” cantar con sentimiento para que el resultado sea “algo espectacular”. Que haga vibrar al público, que se muevan con el coro y den palmas para crear un ambiente en el que miles de personas se conviertan en una sola.
Por ello, animan a todas aquellos aficionados que “algún día hayan sentido el gusanillo” y que solamente hayan cantado entre las cuatro paredes de su hogar, a que se den una oportunidad en este mundo y se apunten a la escuela. La idea es impartir el curso tres o cuatro horas bien un viernes por la tarde o la mañana del sábado. “La música está para disfrutarla y no hace falta ser un profesional para vivir esta aventura”, apunta Escalé.
Una aventura con el objetivo de “crecer interior y personalmente”, algo que “dejamos siempre de lado” pero, en definitiva, “es algo que tenemos que integrar a esta vivencia pedagógica”, concluye.