Bilbao - En India, cuando se celebra una boda en una familia de clase alta, entre las tradiciones que existen está la de donar el dinero y los regalos que se recogen en la ceremonia a personas sin recursos. También el sari que luce la novia suele ser entregado a las personas que más lo necesitan.
En Bilbao, Toral lució un sari de color rojo en la ceremonia del Mehndi; un acto íntimo que ambas familias celebraron en el hotel Domine. El hecho de que el evento tuviese como escenario la capital vizcaina, a miles de kilómetros del país natal de ambas familias, no iba a ser un impedimento para continuar con las tradiciones.
Bipin Desai, padre de Shamik, ha decidido donar el atuendo que lució Toral a alguien que lo necesite. “Me ha llamado para proponerme la idea y me ha parecido genial. Me ha dicho que se lo donemos a alguien que no tenga recursos”, explicó Pilar Angulo, el alma de la boda hindú celebrada en Bizkaia a finales de junio y que despertó gran expectación.
Según relata Angulo, Bipin, importante magnate hotelero y del negocio inmobiliario británico, es un hombre “tremendamente generoso” que por encima de todo ha querido que el sari sea destinado a una causa benéfica. “Cuando me lo planteó pensé: ¡qué historia tan bonita!, pero luego vino la segunda parte que era la de cómo organizarlo y darle forma”, describe a DEIA Pilar Angulo.
A partir de la llamada del padre del novio, Angulo empezó a madurar la propuesta. Después de darle unas cuantas vueltas y barajar diferentes opciones decidió ponerse en contacto con el Banco de Alimentos de Bizkaia y plantearles la posibilidad de poner en marcha una subasta. “Primero había que plantearlo y saber qué les parecía”, apunta. Se entrevistó con Luis Crovetto, vicepresidente del Banco de Alimentos de Bizkaia, y le explicó la idea de hacer una subasta con el sari que Toral lució el día en el que se celebró un encuentro íntimo entre las dos familias. “El sari está manchado con Pitthi, una pasta hecha de cúrcuma, harina de garbanzo y agua que los familiares aplican sobre los novios para iluminar la piel. Lo lució Toral ese día y desde entonces está sin tocar”, relató Angulo.
Por su parte, Luis Crovettó, del Banco de Alimentos, reconoció ayer a DEIA que la llamada de Pilar les hizo mucha ilusión: “Me parece una historia preciosa, en la que estamos encantados de participar y felices con que se haya acordado de nosotros para dar forma a la subasta”, apunta. “He hablado con el resto de los compañeros del Banco de Alimentos y les ha parecido una propuesta muy bonita e interesante”, concretó Crovetto.
La idea ya está sobre la mesa y el primer paso, está dado. Ahora Pilar Angulo y Luis Crovetto trabajarán conjuntamente para dar forma a la subasta con la que pretenden recaudar un dinero para destinar a personas que tienen escasos recursos económicos en Bizkaia. “Espero que nos salga bien. Ya estamos manos a la obra”, concluye Angulo.