Barakaldo. Las personas que el pasado año se sumaron al aprendizaje del euskera en Barakaldo no recibirán ninguna ayuda económica. El Ayuntamiento fabril ha anunciado a través de un pequeño comunicado en su página web que este año no habrá subvenciones para hacer más asequible el estudio de la lengua vasca. La falta de un presupuesto renovado para este ejercicio ha llevado al equipo de gobierno a no disponer de ninguna partida destinada a este fin, por lo que los alumnos del euskaltegi fabril deberán abonar la factura de sus estudios íntegra o intentar acceder las ayudas que otorgan otros organismos al euskera.
El equipo de gobierno socialista desechó llegar a acuerdos con el resto de formaciones políticas de cara a los nuevos presupuestos; así, la única opción que quedaba sobre la mesa pasaba por prorrogar los presupuestos de 2012. Durante el pasado pleno de mayo, PNV y PSE apoyaron la aprobación de un crédito adicional de 3,6 millones de euros para que las cuentas del pasado año pudieran hacer frente a problemas urgentes como la construcción del paso en superficie que demandan las mujeres de Lutxana para evitar el cruce de los túneles -cerrados durante la noche desde el pasado día 31-.
La modificación presupuestaria será suficiente para afrontar, además, un nuevo pago de la finca Munoa, así como la renovación del plan de abastecimiento de la red de aguas. Pero el presupuesto puede no ser suficiente para afrontar los gastos que se vayan sucediendo a lo largo del año.
El primer recorte se está haciendo efectivo en las ayudas al euskera. Según especifica el Ayuntamiento en el anuncio de su página web, "el Ayuntamiento de Barakaldo no ofrecerá ayudas para el aprendizaje del euskera en el curso 2012-2013". La razón, según explican desde el equipo de gobierno, es que "en el presupuesto municipal de 2013 no se habilitará ninguna partida para ofrecer ayudas a aquellos baracaldeses que hayan estado estudiando euskera en el curso académico 2012-2013".
sin normativa El presupuesto se ha prorrogado. Y el año pasado, a través de los acuerdos alcanzados con el PNV, los jeltzales pudieron incorporar a las cuentas una partida de 50.000 euros destinada a las ayudas al euskera. Esta partida económica ayudó a que se creara una nueva ordenanza para regular el destino de las subvenciones. Los beneficiarios de dichas ayudas fueron las personas mayores de 16 años que cursen euskera en los euskaltegis homologados por HABE -municipales y AEK- y los padres y madres de alumnos matriculados en modelos educativos B y D. Todos ellos podían optar a recibir un impulso económico para continuar su formación en relación al euskera.
Estas medidas no están contempladas, según el anuncio, en el presupuesto de este año, por lo que quienes estudiaron euskera el pasado curso en el municipio no recibirán su correspondiente ayuda. En cambio, el Ayuntamiento deja en manos de otras instituciones la subvención de estos estudios: "Queremos recordar que estos alumnos en septiembre podrán solicitar las ayudas que a tal efecto ofrecerá HABE".