Balparda inicia su transformación
Santurtzi alcanza un acuerdo con la Diputación Foral para reparcelar los 72.000 metros cuadrados del polígono industrial El convenio impulsará la zona empresarial para "generar actividad y empleo"
Santurtzi. Balparda por fin comenzará a andar. El Ayuntamiento de Santurtzi aprobará hoy mismo un convenio junto a la Diputación Foral de Bizkaia que constituirá el primer paso en la transformación de esta zona industrial de la localidad. No es la primera vez que se planea el despegue empresarial del polígono, pero los planes municipales siempre se han topado con obstáculos debido, principalmente, a las características especiales de la zona, donde conviven viviendas particulares con empresas. Ahora, gracias a este acuerdo alcanzado entre ambas instituciones, se podrán reparcelar los terrenos para impulsar la actividad económica y generar nuevos puestos de trabajo.
El pleno de Santurtzi, que se celebrará durante la mañana de hoy, será el encargado de dar el visto bueno definitivo al convenio interinstitucional. En este acuerdo el Ayuntamiento trabajará junto a la sociedad Azpiegitura para tratar de impulsar un polígono que se asentó en la localidad marinera hace más de 45 años. Balparda posee 72.000 metros cuadrados de terreno entre los que se distribuyen diferentes empresas y 17 viviendas unifamiliares, que acogen a unos 70 trabajadores y 12 familias, según los datos aportados por el Ayuntamiento marinero en 2010.
A pesar de ubicarse en una zona privilegiada -frente al polígono industrial El Árbol-, cerca del puerto de Bilbao y bien comunicado con la autopista, el polígono nunca llegó a arrancar. "Se trata de un ámbito rural cuya puesta en marcha ha sido históricamente difícil de gestionar debido a las numerosas cargas urbanísticas que tiene", explicó ayer Ricardo Ituarte, alcalde de Santurtzi. Los mayores problemas a la hora de comenzar la transformación de la zona de Balparda han venido impulsados, precisamente, por la existencia de viviendas de particulares entre las empresas.
La ordenación de este terreno industrial trae aparejada la inevitable desaparición de estos hogares y, por lo tanto, el realojo de sus vecinos. De las 17 viviendas de la zona únicamente 12 seguirían habitadas y necesitarían de una nueva vivienda una vez llevado a cabo el proyecto. Sin embargo, el realojo no ha estado contemplado en la iniciativa hasta hace algo más de un año, cuando se realizó la último aprobación del Plan Especial para la unidad.
Reparcelación El convenio con Azpiegitura es una noticia positiva para el municipio. "Se trata del primer paso para la ordenación de este espacio", describió el primer edil. En el acuerdo, cada una de las partes implicadas "asume una serie de compromisos", aclaró ayer Ituarte. Así, la sociedad foral se encargará de redactar todos los proyectos de reparcelación y urbanización. El Ayuntamiento, por su parte, asume el compromiso de aprobar definitivamente dichos proyectos y de redactar y aprobar el Plan Especial de Ordenación Urbana.
Una vez se realizó el último Plan Especial para el suelo del polígono, el Ayuntamiento redactó un modelo de convenio que posteriormente trasladó a las personas propietarias de parcelas en la zona. El objetivo, conseguir el mayor consenso "para tratar de caminar todos de la mano", indicó el primer edil. Son los propios propietarios de los terrenos quienes deben gestionar la zona y ahora será un trabajo mucho más ágil al ser el Ayuntamiento, de la mano de Azpiegitura, quienes abanderen el proceso. "Así se facilitará la gestión del ámbito para, a posteriori, obtener un suelo para instalar actividades generadoras de empleo y actividad económica", resaltó Ituarte.
Y es que el Ayuntamiento confía en las posibilidades industriales, cuyos terrenos están calificados en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para este fin. El convenio ayudará a animar a las empresas a instalarse en este polígono "y crearse nuevos puestos de trabajo" por los que el alcalde santurtziarra calificó estos trabajos de "fundamentales".
El acuerdo también prevé la cesión por parte del Ayuntamiento del 50% de la parcela que le corresponde al municipio en el polígono a la sociedad foral. De esta manera se cederán 3.000 metros cuadrados para "la edificación de actividades que generen economía y empleo".