Ríase uno de los doce trabajos de Hércules -¿qué supone capturar al toro de Creta o matar al león de Nemea y tomar su piel frente a la vida contrarreloj de hoy en día, donde el trabajo y la vida familiar son, se diga lo que se diga, enemigos irreconciliables...?- y de cualquier otra fatigosa epopeya que se rescate de la historia. Los tiempos modernos aprietan que es una barbaridad, sobre todo, si quien los vive es una mujer trabajadora y con familia a sus espaldas.
Visto así, es lógico y normal lo vivido ayer en Torre Iberdrola: un relajado almuerzo de fin de curso en el restaurante Dorrea, organizado por la Asociación de Empresarias y Directivas de Bizkaia que preside Matilde Elexpuru. Fue un balón de oxígeno, un viento amable en estos días de calor en los termótros y frío gélido en las cuentas de resultados. Ellas, nunca ajenas a la realidad, han capeado el temporal con destreza de arrantzale. Mal que bien, ahí están: en pie para la próxima singaldura.
Fue un encuentro, eso sí, destensado, lejos de los fantasmales días pasados y el incierto porvenir que se avecina. Al mismo, auspiciado por Montse Chirapozu (suya fue la apuesta por el escenario, de muy complejo acceso...), acudieron alrededor de sesenta mujeres frente a dos o tres hombres (Benedicto Martínez, Marcos Franco y José Luis Iglesias, a expensas de que algún otro llegase con retraso...), que habrá de catalogar como valientes. Les rodearon, en el sentido más geográfico y menos acechante del término, Jesy Hernández, Amaia Urkiri, Maitena Anasagasti, Pilar Flecha; la editora Natividad de la Puerta, la estilista del cabello Yolanda Aberasturi, Carmen Acha, Txani Rodríguez, María Jesús Idigoras, Alicia Pastor, Virginia Tamayo, Berta Longás, Esperanza Rodríguez Cugnon; las decoradoras María Loizaga y Susana Gil, Azucena Castro, Marian Ibarrondo, Teresa Busto, recién llegada de Nueva York; María Caballero, Maialen Urruticoechea, Begoña Artabe, Ana Bidaurrazaga, Helena Kaufmann, Julia Diéguez, presidenta de la Asociación de Comerciantes Deusto Bizirik; Carmen Miral, Raquel Díaz de Tudanca, Edurne Davalillo, Isabel Santiago, Marga Cristóbal, Ana Sampedro, Maite Mata, Elvira Mugerza, Begoña Fernández, Itziar Urrutia, Begoña Betolaza, Carolina Pérez Toledo, María Eugenia Castro y un buen número de mujeres capaces de coger el toro por los cuernos y lanzarse a la aventura de crear empresa. ¿Valientes los hombres? Valientes todas las ayer presentes.