BILBAO. Su querencia por los frutosde huertas y cultivos no es nueva;dicen que se remonta al surgimientode la agricultura y que, una vezhalocalizado su alimento preferido, volveráa ese lugar año tras año en elmomento de maduración. El jabalísigue haciéndose notar en Bizkaia.En los últimos años, ha protagonizadomás de 1.100 ataques a cultivosy prados, con una media anual queoscila entre los 179 y los 262.

Obviamente, son más numerososlos ataques en las zonas más ruralesy conmás superficie de cultivosy pastos, pero el jabalí también dejasu huella en localidades a prioriurbanas como Barakaldo (el añopasado se registraron 4 ataques, 11en los últimos cinco) o Bilbao (con4 denuncias por daños entre 2007 y2011). Por municipios, Dima se llevala palma en número de daños: enlos últimos cinco años se han interpuesto110 denuncias por destrozoscausados por los jabalíes, animalesque también se hacen sentir en Zeanuri(con 70 ataques) uOrozko (con 70). Este últimomunicipio fue especialmentecastigado el añopasado: prácticamente una decada diez de los 249 avisos que hubo por este motivo se realizarondesde aquí. En otras localidadescomo Bedia, Alonsotegi, Gatika oSukarrieta, los ataques son testimoniales,con solo una denunciapor daños en el último lustro.

Las intrusiones de los jabalíes encampos de cultivo no son ningunanovedad; aunque comen de todo,estos animales sienten una especialpredilección por los vegetales. Si nolos encuentra en su hábitat natural,no es raro que se adentre en huertasen busca de maíz, trigo o cualquierotra pieza de las huertas. Y nosolo cultivos; los jabalíes, que se destacanpor su voracidad, provocantambién daños en prados donde losganaderos cultivan forraje para susanimales, al excavar la tierra enbusca de lombrices. De hecho, lamayoría de los ataques que se hanproducido en Bizkaia en los últimosaños (809 de 1.102) se ha registradoen prados, en otras 177 ocasioneshan sido huertas su objetivo y en lasrestantes, plantaciones de maíz.

Suelen hacerlo por la noche, cuandola actividadhumana es menor y correnmenos riesgo de ser sorprendidos.Factores como el hecho de quezonas que antes eran bosque esténahora ocupadas por cultivos, elincremento de la población, la urbanizaciónde espacios antes naturaleso el aumento del turismo enestas áreas son algunos de los factoresque influyen en que se acerquenmás a las zonas habitadas,donde se sienten más seguros y, enconsecuencia, también provoquenmás daños en los cultivos.

200 ATAQUES AL AÑO En el últimolustro, el número de ataques de jabalíesa prados y cultivos se ha mantenidorelativamente estable en tornoa los 200, con algunos picos en 2010,cuando se llegarona contabilizar 262daños, o 2008, cuando la cifra nisiquiera superó los 180. Aunque seculpa prácticamente siempre a lasuperpoblación de ejemplares, segúnalgunos estudios, no existe unacorrelación directa entre el númerode jabalíes y los daños que producen,que dependen en mayormedida, por ejemplo,del alimento que puedan encontrar en el bosque, ya quelos cultivos no son la base de su dieta,sino únicamente un complemento.Lamayoría de las intrusiones seproducen al principio del verano,coincidiendo con el momento en elque madura el cereal, aunque en losúltimos años se reparten a lo largode todas las estaciones debido alincremento de los cultivos intensivos,de ciclo más corto.

Al margen del periodo de caza deesta preciada pieza cinegética,cuando su población se dispara y puelosdaños son cuantiosos, desde eldepartamento de Agricultura de laDiputación también se organizanbatidas extraordinarias para minimizarlos ataques. Así, cada año seabaten en torno a 800 jabalíes en elterritorio, algo más de un millar enel último lustro.Pero existen otros métodos paraevitar que los jabalíes se acerquen acomer a los cultivos. Uno de ellos essituarlos de forma estratégica, esdecir, dejar los más apetitosos en elcentro de la plantación, más alejadosde su hábitat natural. Tambiénda buenos resultados dar al animallo que va a buscar y evitar así que seinterne en una huerta: en algunaszonas de Francia yAraba, por ejemplo,se han reducido los daños colocandoalimentos en el borde de loscultivos o incluso dentro de los bosques,de formaque los jabalíes no tienenque internarse en la plantación.