Bilbao. El equipo de buceo de la Brigada Móvil de la Ertzaintza recuperó ayer el cuerpo de un joven de Areatza de 24 años que perdió la vida tras zambullirse en una poza cercana al embalse de Undurraga, en Zeanuri.

Según fuentes del departamento vasco de Interior, el joven se dispuso a darse un baño en una poza existente en el tramo de un riachuelo procedente del propio embalse en Zeanuri. Al parecer, el joven se tiró a la poza a nadar, pero, después de un rato, no aparecía. Al no regresar, en torno a las 13.15 horas, los familiares se acercaron a la poza donde encontraron su ropa, sin embargo no le localizaron, por lo que alertaron a la Ertzainta de lo sucedido. Un técnico de la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno vasco movilizó al grupo de buceo de la Ertzaintza.

Dos agentes del grupo descendieron a pulmón al interior de la poza y, tras varios intentos, consiguieron recuperar el cuerpo sin vida del joven. El equipo médico que acudió al lugar no pudo hacer más que certificar el fallecimiento del bañista de 24 años. Por el momento, se desconoce si la muerte tuvo que ver con una lesión al saltar a la poza o si fue otra la causa. Será la autopsia la que esclarezca los hechos que rodean al fallecimiento del joven.

El fallecido se encontraba en el pantano disfrutando de la jornada de sol en compañía de familiares cuando decidió darse un baño en una poza formada por un riachuelo afluyente del pantano. No en vano, los pantanos, pozas y embalses resultan muy peligrosos. La falta de visibilidad, el cambio constante de los fondos y la profundidad que varía constantemente y la falta de flotabilidad por tratarse de aguas dulces, los convierten en lugares peligrosos para los bañistas.

La de este joven es la primera muerte por ahogamiento en un pantano que se registra este año. El año pasado fueron varios los jóvenes que perdieron la vida tras zambullirse en embalses y pantanos. Si bien, este tipo de muertes son, lógicamente, más habituales en Araba o Nafarroa, al no ser territorios costeros.

Entre los casos que se produjeron el pasado año se encuentra la muerte de Samuel García, un joven navarro que el pasado mes de julio perdió la vida después de salir a navegar con una piragua en el embalse de Yesa. Un mes después, un joven de 17 años falleció ahogado en el embalse de Eugi cuando se bañaba junto a un grupo de amigos.

Rescate Por otra parte, la Er-tzaintza rescató ayer a un escalador de 36 años que resultó herido tras sufrir una caída mientras practicaba escalada en la zona de Atxarte. El accidente tuvo lugar alrededor de las 13.00 horas de ayer. Un técnico de la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno vasco movilizó, en esta ocasión, al grupo de rescate de montaña así como a un helicóptero que se encargaron de auxiliar al joven.

Según fuentes del departamento vasco de Interior, el joven se encontraba escalando en la zona de Atxarte cuando sufrió una caída y quedó colgado en mitad de la pared. El joven resultó herido en una de sus piernas por lo que fue necesaria la intervención del helicóptero para poder evacuarle del lugar. Una vez que el equipo de montaña consiguió rescatarle de la pared fue evacuado en ambulancia hasta el hospital de Galdakao, donde fue atendido de sus lesiones.