Las obras del nuevo atraque del ferry en Zierbena costarán unos 400.000 euros
Las instalaciones estarán listas para el 29 de marzo, fecha de la primera escala
Bilbao. El Puerto de Bilbao estrenará el 29 de marzo un nuevo muelle de pasajeros en la zona más cercana a Zierbena. Unas nuevas instalaciones cuyas obras ya han arrancado y que supondrá un desembolso de 395.000 euros. Las necesidades propuestas por la compañía Brittany Ferries, diferentes a las que tenía la anterior naviera, P&O y el Pride of Bilbao que atracaba en los muelles de Santurtzi, han obligado a la Autoridad Portuaria a crear unas nuevas dependencias que atiendan las necesidades de los pasajeros y vehículos que subirán a bordo del ferry Cap Finisterre.
Según explica Manuel Pascual, director de Brittany Ferries en España, "nosotros necesitamos tres veces más aparcamientos y en la zona de Santurtzi no existía esa posibilidad porque está congestionada por muchas empresas".
En concreto, el nuevo ferry entre Bilbao y el puerto británico de Portsmouth atracará en la esquina del muelle A-3, donde se ubican dos rampas para facilitar el acceso a tierra desde el barco a los turismos y camiones que transportará el barco en sus bodegas. Una zona aislada donde solo hay una explanada sin construcción alguna. Esta situación de aislamiento no asusta al responsable de la naviera, quien indica que "en nuestro tráfico hay muy, muy poco pasajero peatón; nuestros clientes son coches que llegan con personas y camiones y, además, nuestras escalas van a ser muy cortas, de dos o tres horas como máximo. No es un inconveniente estar alejado".
A pesar de todo, el servicio portuario necesita de una mínima infraestructura que atienda la llegada y salida de los pasajeros. Por ello, la Autoridad Portuaria está construyendo una miniterminal marítima, que está levantando la misma empresa que ha construido el edificio de pasajeros para cruceristas de Getxo, y acondicionando el espacio cercano a la línea de atraque. En concreto, los casi 400.000 euros previstos se invertirán en la pavimentación de la zona, con sus correspondientes canalizaciones, habilitar un perímetro cerrado con marquesina de control de la policía y la instalación de la estación marítima referida. Este edificio tendrá una sola altura de planta rectangular y sumará una superficie de 369 m2 con dos voladizos, uno en cada puerta de acceso, para resguardar a los usuarios de las inclemencias del tiempo que serán de calado tanto con calor, frío o lluvia en una zona tan abierta.
Fuentes portuarias y de Brittany Ferries han asegurado que a pesar de la escasez de tiempo hasta la primera escala del próximo 29 de marzo -11 días exactamente- la construcción modular de la terminal va a permitir que todo esté listo a tiempo. Además, utilizar el muelle A-3 permitirá al capitán del Cap Finisterre llevar a cabo una maniobra de atraque mucho más sencilla que la que tendría que hacer en Santurtzi, sobre todo con mala mar. La razón es que este buque tiene 204 metros de largo, 27 metros más que el anterior ferry.