bilbao. Por primera vez, los niños de San Ildefonso y los bombos estarán en Bilbao para protagonizar el sorteo extraordinario de la Lotería Nacional en beneficio de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Será el día 5 de febrero en la Alhóndiga y los pequeños cantores y cinco bombos ocuparán su lugar como transmisores de la suerte.
Los preparativos están en marcha y, en los próximos días, responsables de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) en Madrid visitarán la villa para concretar los detalles con el Ayuntamiento y con la entidad que lucha contra esta enfermedad.
El céntrico edificio recientemente reinaugurado acogerá este evento después de que se descartaran otras ubicaciones como el Palacio Euskalduna o el Teatro Campos. Así lo han confirmado a DEIA fuentes de LAE, administraciones de lotería de Bizkaia y de la propia asociación. El primer sorteo extraordinario en favor de esta ONG se celebró el 6 de mayo de 1989, coincidiendo con el Año Europeo Contra el Cáncer, y en cada edición viaja a una ciudad del Estado, pero nunca había pasado por la villa. En 2009 lo acogió Cáceres, y antes tuvo lugar en Zamora o Zaragoza, entre otras.
El Niño llega el miércoles La noticia de la celebración en la capital vizcaina es del agrado del colectivo de loteros que ven un medio de publicidad en ello. Más cuando los vizcainos tiran la casa por la ventana con el Niño que se celebra este jueves, justo un mes antes del sorteo en favor de la AECC. Y es que, según las previsiones, el gasto en el sorteo del este jueves aumenta este año en seis millones de euros sobre la anterior edición. La respuesta está en la creencia popular que dice que el sorteo del 6 de enero deja más premios que el de Navidad. El Niño ha visitado este territorio 20 veces frente a las 13 que lo ha hecho el Gordo. Estos dos sorteos "no existen en el resto del mundo", explica Juan Antonio Gallardo, director comercial de LAE.
Pero son muy diferentes en la práctica, porque el de Navidad es "reparte y comparte" ya que la mayoría de los billetes se juegan con familiares, amigos y compañeros de trabajo. Además, es habitual que los décimos premiados, en vez de cobrarse, se canjeen por otros para el día 6 de enero. Lo constatan las administraciones de lotería estos días. La mayoría de los clientes se acercan a los mostradores a lo largo de esta semana. "Vienen a cobrar el premio de Navidad y lo cambian por lotería para el Niño. Siempre se dice que toca más", explica Ernesto Olloria del despacho bilbaino de Azkarreta. En general, los aficionados del territorio siguen apostando por la lotería, a pesar de la actual situación económica. Como ejemplo, Gallardo afirma que, mientras en el sorteo del pasado día 22 de diciembre la inversión a nivel estatal fue un 0,2% menor que el año anterior, en Euskadi en general y Bizkaia en particular, aumentó un 1%.
Sin embargo, este año los profesionales han notado un cambio en esta costumbre: los compradores cambian parte y se quedan con el resto. Aún así, esta semana se han formado largas colas que daban la vuelta a la esquina en este despacho ubicado en El Arenal y en Ormaechea, de Indautxu, entre otros. "Y esto no pasaba hace años", se alegra el portavoz de este último, Sergio, que es ya la tercera generación que se dedica a este negocio. Esto responde a que cada persona compra menos cantidad de décimos pero es mayor el número de clientes. Un hecho que apoya Sergio Ormaechea: "Tenemos más trabajo, pero compensamos la menor venta por persona con un mayor número de clientes".
Por otro lado, las provincias que más veces han sido tocadas por la varita de la diosa fortuna el 6 de enero, son, en primer lugar, Madrid y Barcelona, con 41 primeros premios cada una. El territorio de Bizkaia ocupa el tercer lugar con 20, y le siguen Valencia con 18, y Sevilla con 12. Por el contrario, Huesca, Guadalajara, Cuenca y Cáceres, y la ciudad autónoma de Melilla, no han sido agraciados en este sorteo hasta el momento.
"La lotería puede suponer la salida de una mala situación por culpa de la crisis. Puede saldar el crédito del coche, o la hipoteca del piso. Yo he visto casos así. Confío en que el Niño se porte bien", asegura Sergio Ormaechea. La primera constancia institucionalizada de la celebración del sorteo data de 1941 y llegó a convertirse en el segundo en importancia de la Lotería Nacional. En ese año, el director de Timbre y Monopolios de la época decidió oficializarlo haciéndolo extraordinario. Su nombre responde a la proximidad en la fecha con la Adoración del Niño de los Reyes Magos y a las imágenes de los décimos que han pintado los artistas sobre el tema.