laudio
aDENTRARSE ayer en el pórtico de la parroquia de San Pedro de Lamuza de Laudio suponía empaparse y contagiarse de un ambiente típicamente euskaldun. En pocos metros cuadrados, a refugio de la humedad y de una intermitente lluvia, se concentraban puestos de artesanía vasca, el sonido de la música popular y varias hileras de tableros y sillas dispuestos a recibir al más de un centenar de comensales que se sentaron a la mesa.
Presidiendo el recinto, una mesa con un cántaro de cobre estañado y cuatro cascabeles. Todo estaba dispuesto a mediodía para acoger la celebración de la Euskal Jaia y la escenificación del ancestral rito de elección del alcalde de la localidad.
elecciones anticipadas
"Nuevo" alcalde para Laudio
Los candidatos de caca uno de los cuatro barrios del valle -Joan por Larrea, Josef por Olarte, Lorentzo por Larrazabal y Eneko por Goienuri- accedieron al lugar del evento ataviados con sus mejores galas.
En torno a las 13.00 horas, y ante una nutrida representación vecinal, se fueron presentando uno a uno ante el auditorio con las mismas palabras: "Nire burua aurkezten dut Yaingoiko arbaso eta laudioko herritarren aurrean zin egiteko gure herri txit prestu eta noble honen epaile eta alkate karguak hartzeko prestu nagoela eta egin beharreko guztiak zilegitasun osoz egingo ditudala".
Cada uno de ellos introdujo a continuación su nombre escrito en un papel en la bola y tras pronunciar en alto la frase "Yaungoikoaren aurrean ordezkatuta nago eta bere eskuan ni laudioko epaile eta alkatea izatea" depositaron el cascabel en la vasija. Todo quedaba ya en manos de la suerte. La mano inocente de un muchacho fue la encargada de designar al nuevo alcalde. "El elegido ha sido Eneko, del caserío Dubiris del barrio de Goienuri", desvelaron por megafonía.
El nuevo corregidor fue investido por sus resignados oponentes con la correspondiente capa y makila en forma de lanza para, a continuación, dar lectura a su primer discurso. "Pozez eta arduraz betea hartzen dut gaurdanik hasita eta hurrengo Done Mikel egunera arte, laudioko epaile eta alkatea izateko herritaren agindua. Ohi bezala kargua azaroaren batean, hildakoen egunean, eta elizan lurperatuta dauden gure arbasoen eta Yaungoiko beraren aurrean egingo dut. Hala bedi!".
El municipio de Laudio revivió ayer con este singular acto la ancestral costumbre de elegir al alcalde de la localidad el 29 de septiembre, festividad de san Miguel. Todo parece indicar, que este rito se llevaba a cabo en una zona anexa al pórtico de la iglesia de San Pedro de Lamuza, en el lugar en donde se hallaba el recinto de Basalarrin y donde había una mesa de sillería y un gran árbol.
Esta práctica se recogía ya en un documento datado en el año 1341 y era un evento que se realizaba en euskera ya que, durante aquel periodo, los habitantes del valle eran vascoparlantes. Son las razones por las que desde hace pocos años el municipio de Laudio celebra en fechas próximas al día de San Miguel una particular Euskal Jaia en la que el acto central de la mañana es la escenificación, en plena herriko plaza, de ese antiguo y ya desaparecido acto.
los actos del día
Danzas y artesanía
La jornada festiva arrancó a las 11.00 horas con diversos pasacalles por el centro del pueblo a cargo de Lankaietako Lagunak, Polunpak Zanpartzar Taldea, miembros de Fit ta Fik con instrumentos autóctonos y el conjunto Triki Leku.
El pórtico de la parroquia albergó también a lo largo de toda la mañana ocho puestos de artesanía en cuero, abalorios, talla en madera, plantas aromáticas y remedios naturales y talleres para que pudieran entretenerse y divertirse los más peques.
A pesar de la desapacible climatología, que ensombreció un poco el panorama, fueron muchos los laudioarras que se acercaron hasta la herriko plaza para ver la singular representación, ya sea por la curiosidad de conocer algo más de la historia y el pasado del municipio o por apoyar con su presencia en las calles una Euskal Jaia que pretende poner en valor e impulsar el uso en la calle de la lengua vasca.