Orduña
El ganado vacuno charolés de Euskadi ya tiene a los mejores representantes del año de su especie. Un macho semental, de nombre Ut-Langy, y una hembra, llamada Acadie, criados en las explotaciones de la vizcaina María Teresa Monasterio y de la guipuzcoana Belén Galarraga, respectivamente.
La elección tuvo lugar ayer en Orduña durante la celebración del séptimo Concurso Morfológico de la raza "y que ha reunido en la ciudad a unos magníficos animales resultado del trabajo diario y del esfuerzo de unos ganaderos que tienen que sentirse, por ello, muy orgullosos", destacó la organización del evento.
El toro ganador fue descrito por el jurado calificador como "un perfecto ejemplo dentro de las nuevas orientaciones de la raza" y a pesar de su juventud -tan sólo tiene 5 años- demuestra "una gran armonía, un buen equilibrio entre músculo y esqueleto, un morro muy fuerte y una adecuada presencia de cuernos hacia abajo". En cuanto a la vaca que se alzó con el primer premio, los expertos destacaron que se trata de "una magnífica ternera, bien proporcionada, con buen caminar y muy bella".
La explotación de los hermanos Urrutia -asentada en Deba- se alzó con el premio al mejor producto de inseminación con un ejemplar "con facilidad de parto y muy equilibrada que, estamos convencidos, se convertirá en una gran vaca".
La gran triunfadora del certamen fue, finalmente, María Teresa Monasterio -de Abadiño- que se llevó el galardón a la mejor ganadería de reses de la raza charolés de entre las siete que tomaron ayer parte en el certamen (tres de Bizkaia, tres de Gipuzkoa y una de Araba).
La jornada festiva se completó con una exposición de ganado local en la que se pudieron ver 46 reses de vacuno, 36 ejemplares de equino, 66 ovejas y 36 cabras. A pesar de la mañana gris y con lluvia intermitente, la asistencia de gente a la feria fue masiva, así como al espacio reservado al mercado de productos alimenticios y artesanales.
En esta edición, la muestra agrícola de Orduña se compuso de una treintena de puestos alimenticios entre los que destacaban productos como quesos, txakoli, caracoles en conserva, miel, pan o, como no podía faltar, pastel vasco.
Asimismo, y con el objetivo de divulgar y fomentar el consumo de lo productos de nuestros baserritarras, todos aquellos que se acercaron hasta la ciudad tuvieron la oportunidad de degustar caracoles ecológicos y txakoli, ambos productos producidos en la localidad.