La Torre Iberdrola Bilbao, el rascacielos sede de la compañía eléctrica, celebró ayer lunes su décimo aniversario, que cumple siendo la sede de 49 empresas con 2.000 empleados. Aunque desde setiembre de 2011 la torre ya estaba plenamente operativa con varias firmas trabajando no fue hasta el 21 de febrero cuando se hizo el acto protocolario de inauguración.

Participada en un 68,2% por Iberdrola y en un 31,8% por Kutxabank, la electríca instaló la sede social del grupo en las ocho plantas superiores del edificio, y empresas del grupo financiero se instalaron en tres plantas, junto con los primeros inquilinos. El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, se sumó a la celebración. “Este edificio alberga nuestro centro de decisión global y se ha convertido en símbolo del anclaje de Iberdrola a esta tierra”, dijo.

Por su parte, Gregorio Villalabeitia, que preside la entidad bancaria, destacó que “al acoger a algunas de las principales firmas del sector, la torre ha logrado reforzar el posicionamiento de Bilbao como plaza financiera de referencia”.

Obra del arquitecto argentino César Pelli, con sus 165 metros de altura distribuidos en 41 plantas, es el edificio más alto de Euskadi.