BILBAO - Las condiciones de trabajo del Bilbao BBK Live vuelven a ser protagonistas durante la semana posterior a la celebración del evento. Así lo expuso ayer Eragin Bilbao, la Asamblea de Jóvenes Precarios de la localidad vizcaina. El foco principal de sus quejas es la promotora del festival, Last Tour. Según expresaron los representantes de la plataforma, esta empresa es la responsable de que “Bilbao sea la capital de la explotación”.
Los motivos del descontento que motivan la denuncia apuntan tanto a las condiciones durante las horas de trabajo como fuera de este. Eragin Bilbao señaló el escaso sueldo percibido durante el fin de semana festivalero, que cifró en muchos casos por debajo de 5 euros a la hora y en algunos en mínimos de 3,50 euros. Además, el colectivo denunció que las jornadas laborales duraron hasta quince horas diarias.
En cuanto al tiempo reservado para el descanso y la alimentación, las quejas siguieron la misma tónica, pues los operarios fueron, supuestamente, obligados a reposar en el área de acampada con una tienda de campaña propia y recibieron escasas raciones de comida por parte de las subcontratas que se encargaron del día a día en el festival bilbaino.
Eragin criticó también la postura del Ayuntamiento de Bilbao, al que acusaron de “financiar el festival con 1,4 millones de euros pese a conocer la explotación de sus trabajadores” y no descarta emprender acciones judiciales contra Last Tour y el resto de empresas que conforman la organización del festival.
Por su parte, Last Tour se muestra “comprometida con el trabajo digno” y “abierta a cualquier sugerencia” para evitar incidencias de este tipo en futuras ediciones. - Eriz Fraile