Bilbao - La consejera Ana Oregi indicó ayer en su comparecencia que Euskotren, como gestor del servicio tranviario, y Euskal Trenbide Sarea (ETS), como responsable de las infraestructuras ferroviarias, trabajan para mejorar el tránsito del tranvía y hacerlo más seguro. Una de estas labores coordinadas es la de la instalación de una cuarta espira o baliza en el trazado ferroviario en los cruces donde no exista ahora. Una mejora técnica que permitirá además al tranvía retomar la prioridad semafórica con la que contaba antes de inaugurar los nuevos accesos viarios por San Mamés.
Como se recordará, hace ya casi tres años, los nuevos tráficos de vehículos generados por los accesos que entran en Bilbao por la avenida Zunzunegi obligó al tranvía a perder la prioridad de paso que tenía en los semáforos sobre el tráfico de coches y furgonetas. El argumento del Ayuntamiento fue que con la prioridad y la circulación lenta de los convoyes se montarían muchos atascos en esta zona donde el tranvía tiene tres cruces regulados por luminosos
La instalación de esta cuarta espira, denominada de rearme y ubicada en las vías una vez pasado el semáforo, permitirá dar más velocidad de paso a los convoyes, entre seis y ocho segundos, con lo que se acorta la circulación por las intersecciones que comparte con los vehículos entre las calles Gurtubay y Pérez Galdos, Zunzunegi con Luis Briñas, y Zunzunegi con la avenida Sabino Arana. De esta forma, también se acortarán el tiempo total de los viajes del tranvía.
Además, Euskotren y ETS también trabajan en el traslado del paso de cebra que da acceso a la parada terminal de La Casilla desde la plaza que cuenta con la misma denominación.