ESTO es vida, esto es salud, esto es una maravilla”, proclamaba Esperanza, una mujer de origen colombiano que lleva años participando en las actividades que el Ayuntamiento de Bilbao desarrolla dentro del programa de salud para las personas mayores. Esperanza tuvo el atrevimiento de coger el micrófono y acercarse hasta el alcalde Juan Mari Aburto para darle las gracias por la iniciativa municipal. “También quería recordar a los monitores, que son un encanto”, decía. Lo hizo de forma espontánea durante la celebración en La Casilla del tradicional encuentro previo a la Navidad. La “fiesta anual del envejecimiento saludable” reunió ayer a más de 800 personas mayores en el pabellón bilbaino, que disfrutaron de lo lindo. Bailaron, rieron y algunos se llevaron regalos, además de las palabras cariñosas del alcalde: “Os queremos; en el Ayuntamiento queremos a la gente mayor y a las personas mayores, y queremos que sigáis disfrutando”.
Esperanza aplaudía estas palabras, al igual que el resto de los participantes en la fiesta, plagada mayoritariamente de mujeres. Lo mismo hacía Anunciación, una mujer de 58 años y vecina de San Ignacio, que está encantada de haber dado el paso de entrar en este programa de envejecimiento saludable que lleva a cabo el Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao . “Yo soy muy vaga y ya conocía los cursos”, reconocía Anunciación, “pero me daba mucha pereza apuntarme”. Prefería estar todo el día en casa viendo la televisión. Hasta que un día el médico le dijo que “tenía que hacer algo”. Entonces, sí. Se apuntó y allí conoció a Esperanza. “Para mí, ha sido lo mejor, el haber conocido a gente”, decía Anunciación.
Socialización Ese es precisamente uno de los objetivos que busca este programa: “favorecer la socialización de las y los participantes por encima de los criterios deportivos”. También pretende “promocionar un estilo de vida activo e implantar hábitos saludables y herramientas que les permiten aplicarlos en su vida diaria, aumentando su grado de autonomía”. Este programa de promoción de la salud a través del ejercicio físico cuenta con la participación de más de 3.000 personas mayores, siendo la edad media de los inscritos de 79,6 años. Esperanza y Anunciación bajan la media, porque todavía no han llegado a los 60, pero consideran que “si hacemos ejercicio estaremos más sanas”. Así que no se pierden ninguno de los paseos que organizan en el grupo al que pertenecen. “Hay días que vamos desde Deusto hasta el paseo de Los Caños”, contaba Esperanza. “Pero cuando hay cuestas no vamos”, apuntaba Anunciación, “porque el médico me ha dicho que es malo para las lumbares”. Del resto, hacen de todo: baile, gimnasia y muchas relaciones personales. “Conoces a mucha gente y haces muchas amigas”, confirmaban las dos.
Desde el Área de Salud y Consumo destacan que este programa “cuenta con una aceptación de la ciudadanía, que los propios usuarios valoran muy positivamente”. Según señalan desde el Ayuntamiento, “la actividad física es una herramienta clave para el mantenimiento de la salud y este programa está pensado para ayudar a los mayores a evitar el sedentarismo y mantenerse activo”. Pero también quieren resaltar que “se persiguen otro tipo de beneficios”. Entre ellos, señalan la organización de actividades de educación sanitaria y promoción de la salud como control de la tensión arterial, charlas de nutrición, prevención de la gripe y hábitos saludables, entre otros temas. Y también actividades sociales como la fiesta de ayer, la comida de Carnaval o el encuentro de fin de curso. Todo ello hace que los participantes clamaran ayer ¡Esto es vida!