BILBAO. La Diputación Foral de Bizkaia, que financia este servicio junto al Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Bilbao, ha informado hoy de que en este momento se está elaborando un estudio para conocer las necesidades de los usuarios de esta sala y poder ofrecerles un plan de atención personalizado.

Para poner en práctica este plan no se abrirá un nuevo centro, según ha insistido el organismo foral, sino que se utilizarán "dispositivos" de entidades que trabajan en el área de la inclusión social.

En este proceso, ningún usuario de la "narcosala" quedará "desatendido".

Las instituciones y estas entidades, precisamente, trabajan desde 2013 en el diseño de un nuevo modelo de atención a los drogodependientes, un proyecto que no está vinculado al cierre de la "narcosala", según ha indicado la misma fuente.

La "narcosala" de Bilbao abrió sus puertas hace diez años y desde entonces ha estado supervisada por Médicos del Mundo.

Esta organización decidió dejar de prestar este servicio e intentó llegar, sin éxito, a un acuerdo para su traspaso a las instituciones que lo financian.

En un principio, Médicos del Mundo iba a dejar este trabajo el pasado 1 de julio aunque, finalmente, ha prolongado el servicio hasta el 25 de noviembre.