Bilbao. El gran parque que el soterramiento de la A-8 a su paso por Bilbao ha permitido crear entre Lezeaga y Bentazarra será una realidad muy pronto. Las obras ya han comenzado en la nueva cubierta y podrá estar concluido para el próximo otoño. También avanzan a buen ritmo los trabajos para dotar a los barrios de Santa Ana y Santiago de un nuevo espacio con jardines y parterres. En total serán 25.000 metros cuadrados que ganarán los vecinos de estos barrios altos de Basurto.
Junto con la construcción de los nuevos accesos a Bilbao por San Mamés, el trazado de la A-8 a su paso por Bentazarra y Lezeaga se deprimió a lo largo de 350 metros de longitud para cubrirlo. Después de colocar la gran tapa de hormigón que cubre el tránsito, se crearán 20.000 metros cuadrados de terreno libre. Las obras en esta zona ya han empezado, según confirma la diputada de Obras Públicas y Transporte, Itziar Garamendi, y será el próximo otoño, "en septiembre u octubre", cuando los vecinos de ambos barrios puedan disfrutar de una nueva zona de esparcimiento.
El espacio supera los 50 metros de anchura de media y unirá estas dos áreas altas de Basurto que, hasta ahora, siempre han estado separados por esa enorme brecha que era la autopista. Tras reverdecer el cubrimiento de hormigón, se habilitarán zonas verdes que albergarán varios paseos peatonales para el uso del vecindario y se habilitarán viales periféricos para facilitar el tránsito de los vehículos.
La intervención va a ser sencilla, aunque suficiente para que los vecinos que antes se asomaban a sus ventanas y veían y oían el ruido del constante tráfico de la autopista puedan disfrutar de una nueva zona de esparcimiento.
Una vez que terminen los trabajos que tiene encomendados la Diputación, el ente foral cederá la gran parcela al Ayuntamiento de Bilbao para que sea el Consistorio quien, en caso de que lo desee, complete la urbanización y el paisajismo de este solar artificial.
La otra gran zona que se ha creado con el soterramiento de la autopista y los nuevos accesos a Bilbao por San Mamés está situada junto al viejo barrio de casas adosadas de Santa Ana. En este caso, las obras se encuentran más avanzadas y los vecinos podrán disfrutar antes de una nueva área verde, con parterres y jardines que rodearán todo el barrio.
'Chimeneas'
Después de casi cuatro años y medio de soportar todas las molestias de las obras de los nuevos accesos, los habitantes de este barrio tendrán a su disposición un gran espacio verde en la parcela que se ha creado sobre las cubiertas de los falsos túneles que recorren el barrio de forma diagonal por su zona norte.
Las dos grandes chimeneas que se han creado para que el aire circule por el interior de los túneles apenas se distinguirán entre el césped y los árboles que se planten. Además, quedarán aún más disimulados por los colores ocres y verdes con los que se han decorado tanto su interior como por su exterior.
En este caso, los trabajos se encuentran más avanzados ya que comenzaron cuando ni siquiera se habían abierto al tráfico los accesos por San Mamés.