Bilbao. Los usuarios de las piscinas de la Alhóndiga están sorprendidos por el cierre de las instalaciones durante el mes de agosto. "Es cuando más calor hace y, con la terraza abierta, ¿dónde vamos a refrescarnos?", comenta Mari Carmen López, una mujer que acude cada semana a las piscinas para hacer rehabilitación. Las instalaciones acuáticas permanecerán cerradas durante el mes de agosto para llevar a cabo las labores de mantenimiento. "No nos han avisado de nada, nos hemos enterado del cierre por casualidad hablando con los socorristas", se queja Mikel Sáez de Buruaga, otro de los nadadores habituales en el edificio de Philippe Starck. La terraza, por el contrario, continuará abierta.

Las piscinas cubiertas de la Alhóndiga cerrarán el día 31 y volverán a estar disponibles el 21 de agosto, un día después del comienzo de Aste Nagusia; veintiún días que los responsables de las instalaciones han resaltado necesitar para la limpieza y el mantenimiento de las mismas. Desde que se abrieran el pasado año, estas piscinas no han cerrado así que esta será su primera limpieza a fondo. "Me parece mucho tiempo, no creo que se tarde tanto en hacer una limpieza como para tener casi todo el mes cerrado, además en agosto, que es cuando más calor hace, es la idea más descabellada del mundo", cuenta Sáez de Buruaga. "Se necesita tanto tiempo porque los vasos de piscina son también vasos de emergencia, por eso el Departamento de Industria no nos permite vaciar los dos al mismo tiempo y, mientras uno se vacía, el otro debe permanecer lleno, con lo que se tarda el doble", explican desde Alhóndiga Bilbao.

Lo que no se pueden explicar los usuarios es cómo se ha decidido cerrar la piscina si el servicio de terraza continúa abierto. "No lo entendemos. Tenemos la terraza para tomar el sol y leer pero no podemos refrescarnos en el agua, no tiene mucha lógica", comenta Marta Fernández, que acude cada semana con su hijo a darse a un baño. Sin embargo, los datos avalan, según los responsables de AlhóndigaBilbao, el cierre durante agosto. "Es el mes que menos gente utiliza las piscinas, hasta un 40 o 50% menos que el resto del año -en meses como noviembre los bañistas ascienden a 75.000 y en agosto suman 40.000-", argumentan. "Por lo tanto, en agosto se genera menos molestia a los usuarios que si realizáramos el mantenimiento durante el invierno", aseguran.

Más cierres Los carteles informativos sobre el cierre se colocarán "a mediados de este mes", indican. "Pero en los folletos informativos de cursillos ya se avisaba sobre el cierre de agosto", explican. Además, las instalaciones de la Alhóndiga no son las únicas que pararán durante el verano. Las piscinas de La Peña y Artxanda se mantendrán cerradas durante este mes. Y Atxuri, Deusto, Miribilla, Rekalde, Artxanda y Txurdinaga lo harán durante todo el mes de agosto. "Es necesario cerrar durante el proceso de mantenimiento y limpieza", explican desde Bilbao Kirolak. "Vaciar la piscina, repasar las juntas y las depuradoras, limpiar el fondo, volver a llenarlas, hacer un control del agua y calentarla hasta alcanzar la temperatura adecuada puede durar una o dos semanas, pero si son instalaciones nuevas igual hay que hacer más retoques con lo que no es descabellado cerrar durante tres semanas o más", explican. "Además, en verano, sobre todo en los polideportivos con piscinas exteriores, se utilizan muy poco las instalaciones interiores y mantenerlas abiertas con pocos usuarios cuesta mucho dinero", concluyen.