Las llamas consumirán a Doña Sardina y al Carnaval esta tarde

bilbao. Todo tiene un principio y un final y las fiestas no son una excepción. Por ello, el Ayuntamiento de Bilbao ha preparado un final para estos carnavales acorde al colorido de esta festividad.

La sardina arderá "para purificarse de los excesos y renacer el próximo año", indicó Isabel Sánchez Robles, concejala de Turismo y Fiestas, ante la mismísima Doña Sardina, que en ese mismo instante supo lo que le ocurrirá esta tarde. "Tengo miedo", aseguró con la voz entrecortada Doña Sardina. Sin embargo, su corta memoria de pez jugará en este caso a su favor, ya que, como desmostró ayer, al poco tiempo de decir estas palabras ya había olvidado el duro final que le espera.

A las 19.30 horas Que las llamas acaben con Doña Sardina será solo el punto y final de una tarde festiva. Todo empezará alrededor de las 19.30 horas en la plaza Nueva. "Promete ser un estupendo fin de fiesta", resumió Sánchez Robles.

Doña Sardina se dará un baño de multitudes en la Plaza Nueva. "Te pasearemos como una reina por el Casco Viejo", espetó la edil de Turismo y Fiestas a la actriz principal del día. Allí, la protagonista se "sentirá entre amigos". Pero no todos lo serán; los lobos de la compañía teatral Deabru Gorriak bajarán desde Artxanda guiados por la música de un pianista que les llevará hasta la plaza Nueva.

Con la intención de garantizar el orden de lo que consideran su feudo, capturarán a Doña Sardina, responsable de todo el caos carnavalero en el que se ha visto sumida la villa durante los últimos días.

Una vez apresada, los lobos de la adaptación de la obra The Wolves que Deabru Gorriak ha realizado para el Carnaval bilbaino izarán a Doña Sardina para que todos los presentes puedan despedirse. Una vez mostrada al público, los lobos llevarán en volandas a Doña Sardina con destino a la plaza de El Arriaga, dondes entrará a lo grande, precedida de música. Sin embargo, antes de que se le imponga el castigo por haber revolucionado la villa, tendrá oportunidad de decir unas palabras que prometen ser sorprendentes.

Tras el discurso de Doña Sardina, se encenderá la mecha que dejará en meras cenizas el espíritu carnavalero. Un espíritu cargado de fantasía y color, que volverá a revolucionar Bilbao en menos de un año.