Bilbao. Los coches desaparecerán de la calle Maestro García Rivero este verano. El Ayuntamiento de Bilbao va a dar luz verde a la próxima peatonalización de esta arteria de gran tradición hostelera en el centro de Indautxu. Una reivindicación que viene planteando desde hace años la asociación de comerciantes BilbaoCentro y que ahora ha sido acogida con buenos ojos, tanto por el equipo de gobierno municipal como por los partidos políticos de la oposición que no han puesto pegas al proyecto.

El proceso administrativo para que la ciudad gane otros 3.000 metros cuadrados a los coches ya está muy adelantado. En la última reunión del consejo de distrito de Abando, del mes pasado, se aprobó elevar la decisión de peatonalizar la calle a las áreas pertinentes, la de Circulación y la de Obras y Servicios. Fuentes municipales han confirmado que ninguna de las dos áreas ha puesto objeción alguna a la iniciativa y que el pleno del consejo de distrito que se celebrará el próximo día 15 se aprobará la eliminación del tráfico viario. En este órgano de barrio, además de las fuerzas políticas municipales están presentes también las asociaciones de vecinos de distrito, los comerciantes y otras fuerzas vivas del barrio que han dado luz verde a la iniciativa.

El proyecto de las obras aún se tiene que ultimar. El Ayuntamiento es sensible con todas las opiniones de los afectados. Por ello, responsables del Área de Obras y Servicios ya se han puesto en contacto con algunos vecinos de peso en la calle con la intención de abrir en breve un proceso de participación con las diez comunidades de propietarios. Como en otros procesos similares en otros barrios de Bilbao, se dará voz a los vecinos para que aporten sus opiniones y sugerencias, con el fin de cerrar el proyecto de obras con el mayor consenso posible.

Al estilo de la calle diputación El área que dirige José Luis Sabas será la encargada de los trabajos y sus responsables esperan que, tras las sugerencias vecinales, las obras se inicien en primavera con la intención de que antes de finalizar el verano, e incluso para Aste Nagusia, se pueda disfrutar del nuevo espacio peatonal. La intención municipal es crear un espacio para los ciudadanos muy al estilo de la calle Diputación "con terrazas de diseño unificado con usos diurnos para que disfruten tanto mayores como niños", han indicado fuentes municipales.

Las obras no serán complejas. La calle García Rivero es una de la más cortas de la capital, 150 metros de largo por 20 metros de ancho, entre las calles Licenciado Poza y Rodríguez Arias. La arteria carece de garajes comunitarios. Tan sólo existe un negocio, especializado en baterías de coches, que tiene un vado pero que no registra gran paso de vehículos. Por ello, el Área de Circulación no ha puesto pegas a la desaparición de una calzada de un solo sentido que apenas tiene tráfico. Para los conductores que usan este calle, la alternativa tras el verano será que sigan más adelante por la calle Licenciado Poza, giren a la izquierda por la calle Iparragirre, sigan hasta el cruce con Rodríguez Arias para tomar esta calle y llegar a la altura de García Rivero.

El Área de Obras y Servicios tampoco tendrá que invertir mucho dinero. La calle ya cuenta con unas aceras ensanchadas hace poco años con lo que tan sólo tendría que extender las posesiones de la baldosa Bilbao hasta ocupar toda la calzada central. Eso sí, se perderán el estacionamiento de motos existente al lado de Rodríguez Arias y las 28 plazas actuales de aparcamiento para turismos. Sin embargo, eso no es un problema para los residentes ya que desde hace poco más de dos años cuentan con un garaje para residentes en los bajos de la aledaña plaza Campuzano. El área tiene que concretar si aprovecha el hecho de que se va a levantar la calle para, como ha ocurrido en intervenciones similares, proceder a renovar algunas conducciones subterráneas de abastecimiento o saneamiento.

Desde la asociación Bilbao Centro esperan con ganas las obras. Su gerente Jorge Aio explica que "la experiencia que tenemos con otras peatonalizaciones nos dice que son buenas para todos, comerciantes y también vecinos". La última arteria donde se han erradicado los coches es la cercana calle Particular de Indautxu. "Antes, los propietarios se quejaban de que estaba muy oscura, era sucia y poco segura. Ahora todo ha cambiado y, salvo alguna excepción, los vecinos están encantados". No sólo eso. Aio desvelaba que se ha reactivado la actividad comercial. "Desde que los viandantes han tomado el viejo callejón se ha concretado la apertura de tres nuevos comercios", indica, excluyendo la sede que ha abierto la propia asociación Bilbao Centro.