El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió ayer de que la covid-19 “sigue siendo una amenaza para la salud mundial” a pesar de que “ya no es una emergencia sanitaria mundial”. En su discurso inaugural en la reunión de los ministros de salud del G20, en la India, Tedros recordó el aumento de casos que se está produciendo en algunos países y señaló que la OMS ha clasificado BA.2.86, que contiene “un gran número de mutaciones”, como “variante en vigilancia”.

“Esto pone de relieve una vez más la necesidad de que todos los países mantengan la vigilancia”, insistió el máximo dirigente del organismo sanitario internacional de Naciones Unidas. Al margen de la actualidad epidemiológica de la covid-19, Tedros señaló que la pandemia ha enseñado una “lección importante: que cuando la salud está en peligro, todo está en peligro”. En cualquier caso, celebró que “hay signos alentadores de que el mundo está aprendiendo las dolorosas lecciones de la pandemia”. Por ejemplo, aplaudió que las negociaciones sobre un acuerdo pandémico y las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional “avanzan a buen ritmo”. “Ambos procesos son esenciales para crear el marco jurídico y operativo de una arquitectura mundial de seguridad sanitaria integradora, coherente y equitativa”, aseguró .

Por otro lado, Moderna ha anunciado que los datos preliminares de un ensayo clínico confirman que su vacuna actualizada contra la covid-19 para la temporada de vacunación de otoño de 2023 muestra un aumento “significativo” en los anticuerpos neutralizantes contra las variantes EG.5 y FL.1.5.1 de la covid-19. Estos resultados sugieren que la vacuna “puede dirigirse eficazmente contra las variantes circulantes previstas durante la próxima temporada de vacunación”, según la compañía.

Moderna ha presentado su vacuna actualizada a la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), a la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) y a otros organismos reguladores de todo el mundo. La compañía señala que, aunque esté pendiente de autorización, “estará lista para la vacunación de otoño con un suministro mundial suficiente”.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado recientemente la cepa EG.5, o Eris, como variante de interés. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), EG.5 es actualmente la variante dominante en Estados Unidos y otros países, al tiempo que representa una proporción cada vez mayor de casos en todo el mundo. La variante FL 1.5.1, o Fornax, también está empezando a surgir en algunas partes.