Cuatro de cada diez vascos apuestan por que se adopten más restricciones para hacer frente a la pandemia del coronavirus y un 45% por un confinamiento domiciliario, frente al 52% que rechaza este última medida. Además, un 71% de la población cree que es "poco o nada probable" que se contagie, y un 42% considera que en 2022 se podrá llegar a vivir de forma similar a antes de la incidencia de la covid-19.

Estas son las principales conclusiones del estudio del Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno vasco, titulado 'Percepciones ciudadanas sobre la pandemia, realizado entre los días 27 y 30 del pasado mes de enero entre 900 personas.

El estudio destaca que el 61% de los vascos cree que la mayoría de la población está reaccionando con civismo y solidaridad ante las medidas adoptadas contra la pandemia, mientras otro 34% considera que está siendo "poco cívica e insolidaria".

Un 40% considera que, ante la evolución actual de la pandemia, deberían imponerse medidas más restrictivas, un 24% estima que las medidas actuales son adecuadas y un 28% que deberían adoptarse medidas diferentes de las adoptadas hasta el momento. Solo un 2% cree que las medidas deberían ser menos restrictivas. En cuanto a la posibilidad de imponer un nuevo confinamiento domiciliario un 45% apuesta por él y un 52% lo rechaza.

MOVILIDAD ENTRE MUNICIPIOS

Más de la mitad de los encuestados, un 55% cree que la norma actual que prohíbe los desplazamientos entre municipios en Euskadi es la más adecuada, un 24% que solo deberían prohibirse en las localidades en las que la situación es peor, y un 16% que no se debería limitarse la movilidad entre ellas.

Un porcentaje mayor, un 61%, considera que la restricción de las reuniones en grupo a un máximo de 4 personas es adecuada, un 30% opina que deberían prohibirse las reuniones entre personas no convivientes y un 6% por el contrario, que no deberían limitarse los encuentros grupales.

CIERRE DE LA HOSTELERÍA

Sobre el cierre de los establecimientos de hostelería, un 46% se muestra de acuerdo con la medida actualmente en vigor de cierre de establecimientos en los municipios en los que la situación es peor, un 27% cree que no debería cerrarse la hostelería en ningún municipio, y un 23% que debería cerrarse en todos los municipios.

En cuanto a la limitación para realizar deporte en grupo, la opinión mayoritaria (42%) está de acuerdo con la norma vigente, que prohíbe el deporte en grupo en los municipios en los que la situación es peor, un 35% cree que debería prohibirse en todos los municipios, y un 19% que no debería prohibirse en ningún municipio.

RIESGO DE CONTAGIO

La encuesta constata que se mantiene la "alta preocupación" por la pandemia, en concreto, un 89% declaran estar muy o bastante preocupados por la expansión del coronavirus. Sin embargo, son menos las personas que se muestran muy o bastante preocupadas por enfermar ellas mismas (78%) que quienes lo están por el hecho de que puedan enfermar otras personas de su entorno cercano (93%).

Las actividades que se perciben como de mayor riesgo para contagiarse de coronavirus son las reuniones en domicilios particulares con personas no convivientes (un 89% cree que tiene mucho o bastante riesgo), desplazarse en transporte público (85%) y comer o beber en el interior de bares o restaurantes (80%).

Se percibe como ligeramente menos peligroso trabajar en un espacio cerrado con otras personas (77%), asistir a clase en un espacio cerrado junto a otras personas (73%) y, por último, ir a tiendas o centros comerciales (73%).

Sin embargo, un 71% de la población considera que, teniendo en cuenta sus actividades, sus contactos personales y las medidas de prevención que adopta, es "poco o nada probable" que se contagie de coronavirus. Un 7% cree que es "muy probable" y un 18% que es "bastante probable".

SOCIEDAD POST-COVID

Los encuestados también han dado su opinión sobre las expectativas para volver a vivir de manera similar a antes de la pandemia. La mayoría cree que será en 2022 (42%) y un 26% cree que en 2023 o más tarde. Un 13% de la población espera que sea a finales de este año y solo un 6% en verano de este año. Un 8% cree que nunca se volverá a vivir de forma parecida a antes de la aparición de la covid-19.

La mayoría de la población no cree que la sociedad vasca cambie en cuanto a la solidaridad y la igualdad entre hombres y mujeres, pero sí en cuanto a las desigualdades sociales, así un 74% cree que, tras la pandemia, las desigualdades serán mayores.

VACUNACIÓN

En la actualidad, un 75% de la población afirma que, cuando se le ofrezca la posibilidad de vacunarse, acudirá a inocularse el antídoto. Un 19% todavía no está seguro de lo que hará y solo un 5% afirma que no se vacunará.

Los principales motivos para no querer vacunarse son que preferirían esperar más (lo menciona un 41% de quienes afirman que no se vacunarán), y que creen que la vacuna no es segura (30%).

Entre quienes tienen dudas sobre si vacunarse o no, los siguientes factores contribuirían a que se decantaran a favor de la vacunación: el hecho de que se vieran en una situación de gran riesgo de contagio (42%), que otras personas de su entorno no tuvieran efectos adversos tras vacunarse (33%), que su médico de cabecera se lo recomendara (25%) y que vacunarse fuera imprescindible para viajar a otros países (16%).

CONSECUENCIAS ECONÓMICAS

Sobre las consecuencias económicas, un 43% dice estar muy preocupado y otro 35% bastante preocupado por las consecuencias que la crisis pueda tener en su economía familiar. Esa preocupación es mayor cuando se pregunta por las posibles consecuencias para la economía de Euskadi, en concreto, un 58% está muy preocupado y un 37% bastante.

Un 36% de la población señala que su situación económica ha empeorado con la pandemia, un 14% dice que mucho y un 22% algo. Un 24% prevé que su situación habrá empeorado dentro de un año, un 52% cree que no cambiará y un 19% que habrá mejorado.

Por otra parte, preocupan relativamente algo menos las consecuencias de la pandemia en la escolarización de los hijos, un 44% dicen que mucho y un 33% bastante. En el caso de las consecuencias para la salud mental o emocional, la preocupación es mucha para un 36% un bastante para un 38 y, en el caso de los problemas de conciliación familiar en el hogar esas variaciones son 27% y 28%.

Un 60% de la ciudadanía dice estar más preocupada por las consecuencias sobre la salud, un 17% por las consecuencias en la economía y el empleo y un 23% dicen espontáneamente que ambas les preocupan por igual.

La población vasca valora con 6,1 puntos su situación emocional personal, en una escala de 0 a 10, en la que 0 significa que se encuentra totalmente hundido y 10 totalmente animado. Por otra parte, un 14% de la ciudadanía vasca cree que "lo peor" de la pandemia "ya ha pasado", un 34% cree que se está viviendo "el peor momento" y un 45% que lo peor está "aún por llegar".

SISTEMA SANITARIO

Por otro lado, el 74% de la ciudadanía concede una puntuación entre 7 y 10 a la atención sanitaria que Osakidetza está dando a las personas enfermas de Covid-19, que se valora con 7,6 puntos de media. Un 46% de la ciudadanía cree que la respuesta del sistema sanitario vasco a la pandemia está siendo mejor que la de otras comunidades autónomas, un 41% cree que es igual y solo un 2% que es peor.

En cuanto a la claridad de las informaciones y recomendaciones de las autoridades sanitarias, un 40% de la población da una puntuación de entre 7 y 10 puntos. El 75% de los vascos aprueba la actuación del Gobierno Vasco en esta crisis, con una valoración media de 5,7 puntos sobre 10, mientras que, en el caso del Gobierno del Estado, se valora con 4,4 puntos y en el de la UE con 4,9.