LOS Centros de Salud de Euskadi pusieron ayer en marcha la campaña de vacunación antigripal. Durante las próximas seis semanas los grupos de riesgo -mayores de 65 años, embarazadas o personas con enfermedades crónicas- están llamados a vacunarse para evitar complicaciones derivadas de una gripe.

“La vacuna lo que pretende es reducir la mortalidad y las complicaciones que realmente se dan en las personas que tienen factores de riesgo. Por ello, al vacunarse este grupo de personas puede que pasen una gripe, pero no tendrán tantas complicaciones”, explicó Amaia Kareaga, jefa de la unidad vacunal en el Centro de Salud del Casco Viejo, por el que ayer pasaron alrededor de 66 personas a vacunarse “y así ya nos olvidamos de la inyección”.

Entre ellas estaba Carmen Arenas, una vecina de Atxuri de 68 años que siempre acude a su centro de salud el primer día que comienza la campaña de vacunación. “Vengo todos los años porque es muy importante vacunarse”, admite concienciada de la necesidad de ponerse la inyección para pasar el otoño y el invierno sin verse afectada por la gripe. “Si te vacunas, puedes coger algo, pero es mucho más leve de lo que podría ser si no te vacunas”, relata.

Otra de las personas que ayer pasó por su centro de salud para vacunarse fue Julio, un bilbaino de 48 años. “Soy bastante alérgico y tengo asma”, dijo, y por ello se vacuna todos los años “desde hace tiempo” para evitar complicaciones en el caso de que se coja una gripe. “Antes, cada vez que cogía gripe, se me complicaba mucho y terminaba siempre con antibióticos y a veces con cortisona”, explicó a DEIA, asegurando que “siempre arrastraba las gripes durante mucho tiempo”. Sin embargo, desde que comenzó a vacunarse asegura que no ha cogido ninguna. “De vez en cuando igual cojo algún catarro, pero ya no son tan fuertes”, explica.

Sin embargo, a pesar de que ayer comenzó la campaña de vacunación antigripal, la doctora Kareaga incidió en las medidas universales “que están muy claras, pero que no hay que olvidarlas”. Entre ellas se encuentran utilizar pañuelos desechables, lavarse las manos y taparse la boca y la nariz a la hora de toser o estornudar. “Esto último hay que hacerlo con el brazo en vez de con las manos, porque a pesar de que insistimos con que hay que limpiarse las manos con frecuencia, estas están más en contacto con el resto de personas”, indicó, haciendo hincapié en que la vacuna también es una medida universal y “la más eficaz que tenemos”.

“Una gripe no muy virulenta” En la misma línea, Kareaga aseguró que este año están “esperanzados” porque creen que no será una gripe muy virulenta. “Nos suele venir el virus que unos meses antes ha causado la epidemia en el hemisferio sur y, por lo que nos cuentan, este año no ha sido excesivamente virulento”, informa. Sin embargo, la doctora asegura que, a pesar de ello, la vacunación es imprescindible. “Sigue siendo muy importante. El año pasado, en teoría, tampoco esperábamos una gripe de las más virulentas y al menos 67 personas murieron en la Comunidad Autónoma Vasca”, recordó antes de añadir que “aunque no esperemos una epidemia muy virulenta, siguen existiendo los riegos de complicación, incluso que lleve a la muerte”.

Este año, Osakidetza ha impuesto una nueva medida para evitar el contagio de la gripe en las salas de espera. Así, tanto en urgencias como en los centros de salud estarán disponibles mascarillas para quienes las quieran usar. “Lo que se pretende con esta iniciativa es que el paciente que no esté con gripe pueda protegerse por si en la misma sala hay alguien con la enfermedad, porque la transmisión del virus es oral”, asegura Kareaga.

Varias personas que acudieron a vacunarse coincidieron en que les parece “muy positiva” la iniciativa implantada por el Departamento de Salud del Gobierno vasco. “Ahora mismo voy a coger una por si cuando vaya a urgencias no quedan. Es muy positiva esta iniciativa porque sirve para evitar que los virus de otras personas te contagien. Me parece de 10”, concluyeron.