ALMERÍA. La magistrada Alejandra Dodero ha facilitado en la sala de vistas, ante la Fiscalía, acusación particular, defensa y la propia Quezada, las primeras instrucciones a las siete mujeres y dos hombres del jurado sobre cómo deberán de redactar y elaborar el veredicto que servirá de base para la futura sentencia.

Dodero ha insistido en que deben declarar probados o no los diferentes puntos recogidos "en base a las pruebas que han presenciado directamente" y actuar con "total independencia, valorar y decidir lo que cada uno personalmente crea que es correcto" pero actuando con "responsabilidad" y ateniéndose a las conclusiones "racionalmente" obtenidas a lo largo de la vista.

Ha recordado que juraron o prometieron actuar con "imparcialidad, sin odio ni afecto", dejando "fuera todo tipo de sentimientos".

Una vez sean incomunicados, no podrán recibir llamadas, visitas o hablar con medios de comunicación; se les retirarán los teléfonos móviles y podrán descansar cuando quieran pero sin salir, ya que todos las deliberaciones "son secretas y no se pueden contar a nadie".

La magistrada ha subrayado las circunstancias que diferencian un homicidio de un asesinato, incidiendo en la alevosía, que "elimina las posibilidades de defensa de la víctima" y se produce cuando se trata de un "ataque sorpresivo" y por parte de una persona del entorno familiar, como elemento diferenciador de ambos delitos.

El objeto del veredicto está dividido en cinco partes, una por cada una de las posibles acusaciones, con el grado de participación, circunstancias modificativas y el hecho delictivo sobre el que deben determinar la culpabilidad o inculpabilidad".

Prácticamente se descarta que el veredicto pueda estar listo este miércoles, sino que su lectura se hará, previsiblemente, mañana.

Si esto se produce, serán escoltados por la Policía Nacional al hotel en el que pasarán la noche y mañana serán conducidos de nuevo al Palacio de Justicia. Una vez hayan concluido, se dará aviso a las partes personadas y se trasladará a Quezada a la Audiencia Provincial para llevar a cabo la lectura del veredicto ante ella.

En concreto, deberán determinar si la acusada es culpable de un delito de asesinato con alevosía, como sostiene la fiscal Elena María Fernández, que reclama prisión permanente revisable para Quezada por este ilícito, o si como sostiene la defensa de los padres de Gabriel Cruz concurre también ensañamiento, si bien la pena solicitada sería la misma en este caso.

También deberán pronunciarse sobre los dos delitos de lesiones psíquicas, uno sobre la madre y otro sobre el padre de Gabriel, que ven Ministerio Público y acusación por su actuación posterior en la búsqueda del menor. Lo mismo que deberán hacer en el caso de los dos delitos contra la integridad moral que únicamente contempla el abogado de la familia del niño, Francisco Torres.

El letrado de la defensa, Esteban Hernández Thiel, califica los hechos como constitutivos de un delito de homicidio imprudente o, subsidiariamente, homicidio doloso, y solicita 3 y 15 años, respectivamente, de prisión por ellos.