DONOSTIA. Según informa en su edición de este domingo el periódico guipuzcoano El Diario Vasco, la mujer continúa sin ser imputada por la muerte del menor, que la Ertzaintza investiga como homicidio, mientras el juzgado de Azpeitia que instruye el caso espera a que se recupere de la presunta alteración mental que sufrió y que podría haberla llevado a acabar con la vida del pequeño.

Una vez restablecida de las graves heridas que al parecer se infligió a sí misma, por las que permaneció varios días en la UCI del Hospital Universitario de Donostia, la madre del pequeño muerto ha sido trasladada a la Unidad de Psiquiatría del mismo centro sanitario, sin que por el momento haya sido posible tomarle declaración.

Las citadas fuentes señalan que la mujer permanecerá en dicha unidad mientras lo estimen oportuno los médicos que la atienden y los facultativos del Instituto de Medicina Legal de Donostia.

Los hechos ocurrieron en la tarde del 23 de julio pasado en el interior de un caserío de la localidad guipuzcoana de Azpeitia, adonde acudieron los servicios de emergencias y la Ertzaintza, que encontraron al menor de 4 años fallecido, presuntamente, por ahogamiento y a la madre con heridas graves.