Multa de 900 euros a un vecino de Elvillar (Araba) por maltrato animal
Tiene perros de caza que han soportado un "entorno hediondo" carente de salubridad
GASTEIZ. Los hechos condenados comenzaron hace años en las afueras de esta localidad, donde este vecino mantiene en una zona vallada a un grupo de perros destinados a la práctica de la caza.
Según han explicado estas dos asociaciones, los animales han soportado un "entorno hediondo" carente de la más elemental salubridad, han sido alimentados de manera "deficiente y esporádica" y tenían recipientes de agua en mal estado.
Han denunciado que durante este tiempo han tenido constancia de la "frecuente sustitución" de algunos de los perros encerrados en el lugar e incluso del "penoso parto" de una perra en plena ola de frío.
ATEA denunció la situación ante la Fiscalía provincial de Medio Ambiente y Apasos se encargó de la acusación popular durante el juicio, celebrado el pasado mes de octubre.
Los dos colectivos, a pesar de que ven el castigo "absurdo por insuficiente", han considerado que la sentencia supone "un paso más en la ardua tarea del cambio de mentalidad social respecto a la consideración que merecen los animales domésticos".
Además, han condenado el uso de animales "como meros elementos auxiliares para prácticas letales como la caza lúdica", en la que se les somete a unos "sobreesfuerzos y a un trato que no merecen".