Mueren a tiros un padre y sus dos hijos, uno menor, en una reyerta en Cáseda

CÁSEDA - Tres miembros de una misma familia -Fermín Jiménez Echeverría, de 50 años, y sus hijos José Antonio y Cristian, de 29 y 17- murieron ayer en Cáseda al recibir sendos disparos de una escopeta de caza en el curso de una reyerta con integrantes de otro clan gitano. La Policía Foral detuvo minutos después del triple homicidio a tres vecinos de Munián de la Solana -Juan Carlos Jiménez Jiménez, de 53 años, y sus hijos Juan Carlos y Emilio, de 22 y 18- que se dieron a la fuga en un automóvil tras el homicidio.

El trágico suceso, que sumió a Cáseda en una profunda consternación, se produjo a las 18.53 horas en la calle Nueva de la localidad, muy cerca de la residencia de ancianos y del club de jubilados. En la misma calle del escenario del triple crimen, residía uno de los fallecidos -José Antonio- y su hermano Julio, quien mantiene una relación con una hija y hermana de los tres detenidos, con la que tiene una hija de 2 años.

PROBLEMAS DE PAREJA Según los primeros datos de la investigación, que ha sido asumida conjuntamente por la Policía Foral y la Guardia Civil bajo la dirección del juzgado de Instrucción número 2 de Aoiz, Fermín Jiménez Echeverría y su hijo Cristian se desplazaron ayer por la tarde hasta Cáseda desde Eslava, donde tenían fijada su residencia, y junto con el otro fallecido, José Antonio, y Julio, entablaron una discusión en la vía pública con los tres detenidos, en la que también se encontraba presente Amparo y la hija menor de la pareja. La discusión, al parecer motivada por la relación que mantenían Julio y Amparo, que habían tenido problemas de convivencia recientemente, acabó degenerando en un enfrentamiento violento.

Los testimonios recabados indican que la joven había dejado días atrás su domicilio en Cáseda y se había trasladado a Muniáin de la Solana, en Tierra Estella, con su familia. Sin embargo, durante el día de ayer regresó a Cáseda con intención de retomar la convivencia con su pareja.

UNA ESCOPETA EN EL COCHE Testigos indicaron que en el curso de la pelea uno de los familiares de la joven se dirigió a un automóvil Seat Toledo de color blanco aparcado en las inmediaciones para coger una escopeta de caza con la que se efectuaron los tres disparos que alcanzaron a Fermín Jiménez Echeverría y a sus hijos José Antonio y Cristian. A continuación, Juan Carlos Jiménez Jiménez y sus hijos Juan Carlos y Emilio se montaron en el mismo automóvil y emprendieron la huida.

El vehículo en el que se dieron a la fuga los supuestos autores del triple homicidio fue localizado sobre las 19.00 horas por una patrulla de la Policía Foral de la comisaría de Tafalla que acabó interceptándolo minutos después en la carretera NA-132 a la altura de San Martín de Unx, a unos 20 kilómetros de Cáseda. Los agentes se cruzaron con ellos por la misma carretera, dieron la vuelta y comenzaron una breve persecución hasta que detuvieron el vehículo en el punto kilométrico 44, según informó el Cuerpo autonómico.

Los tres varones tiroteados murieron en el lugar, sin que pudieran hacer nada por sus vidas las asistencias sanitarias desplazadas hasta Cáseda.