La Luna se teñirá de rojo
El director del Planetario de Iruñea explica a DEIA en qué consiste este fenómeno
Bilbao - Desde el principio de los tiempos, la Luna ha provocado fascinación en el ser humano. Hoy, durante 102 minutos, se podrá ver la Luna roja por el eclipse más largo del siglo. Distintas civilizaciones de todo el mundo han asociado el eclipse de Luna de sangre a todo tipo de creencias. Para los mayas, la Luna roja significaba que los dioses estaban luchando y para los incas era el jaguar, uno de los elementos de su trinidad sagrada, como representación del mundo de los muertos.
La cultura cristiana también vincula la Luna roja con el fin del mundo. Apocalipsis 6.12: Hubo un gran terremoto y el sol se volvió negro como paño de saco de pelo, y la luna se volvió como sangre; Hechos 2.20: El sol se convertirá en tinieblas y la luna de sangre, antes de que venga el gran y notable día del Señor. Hombres lobos desatados, malformaciones de fetos, maldiciones? Por suerte la espiritualidad del Tíbet ayuda a llenar de claridad este rosario de desgracias ya que en el Budismo los buenos actos que se realizan en un eclipse multiplican el karma. Incluso Álex de la Iglesia se dejó seducir por el embrujo de este fenómeno para su último taquillazo, Perfectos desconocidos (2017).
Supersticiones a parte, el caso es que “mañana (por hoy) vamos disfrutar de un momento muy mágico”, asegura el astrofísico Javier Armentia. Pero no solo por el eclipse, sino porque la Luna se teñirá de color rojo y se producirá una alineación de Marte con este satélite, la Tierra y el Sol, lo que hará que el planeta marciano se sitúe más próximo a nosotros, aumentado su tamaño visible. El director del Planetario de Iruñea explica a DEIA qué podrán ver aquellas personas que esta noche miren al cielo de Euskal Herria. En realidad, al cielo de gran parte del Hemisferio Oriental de la Tierra porque el fenómeno en su totalidad será visible desde África, Oriente Medio y países de Asia central. Y será visible desde el este de América del Sur cuando termine, y desde Australia al inicio del mismo.
“Esta es una buena oportunidad para ver un eclipse de Luna. La Luna llena, que está al otro lado del Sol, se mete en la sombra de la Tierra. Esto pasa dos veces al año, no es un fenómeno extraño, pero no siempre podemos verlo. Las condiciones del viernes son buenas para verlo. Va a ser un eclipse largo dentro de los que hay este siglo, pero no lo vamos a ver entero”, afirma Armentia. Según comenta, “desde nuestra latitud y longitud lo vamos a ver justo cuando sale la Luna por el horizonte sobre las 21.30”.
Cuando salga la Luna, dice, “vamos a poder verla a pesar de estar en sombra porque la Tierra le va a reflejar un poco de luz que al pasar por la atmósfera terrestre va a ser de color rojiza, eso que se escucha tanto de Luna de sangre. Pero creo que será más de color de cobre”. Esta capa de la Tierra, que actúa como una lente, desvía todos los componentes de la luz del Sol, excepto la rojiza, que sufre “un menor desvío” y tiñe la faz de la Luna.
El divulgador científico apunta que “vamos a poder ver la Luna mientras está saliendo por el Suroeste, menos iluminada, de color rojo, y al cabo de un rato saldrá de la sombra de la Tierra y se empezará a iluminar”. Este efecto durará aproximadamente “hora y media en la que vamos a poder ir viendo cómo la Luna va a ir saliendo de la sombra de la Tierra y volviendo a ser una luna llena normal a partir de la media noche”.
A diferencia de los eclipses solares, no se necesita ningún equipo especial. Los eclipses de Luna pueden ser vistos con seguridad directamente a simple vista, telescopios o binoculares. “Solo hay que asegurarse de estar en un sitio orientado al Suroeste despejado de obstáculos que nos tapen la visión”, afirma Armentia desde Lerín, donde actualmente se celebran las II Jornadas de Astroturismo Lerín Tierra Estrellada.
Por su parte, el Ayuntamiento de Donostia instalará telescopios en el monte Urgull, para llevar a cabo una observación pública en colaboración con la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Solo las nubes podrían empañar esta experiencia ya que según Euskalmet, el cielo volverá a estar muy nuboso en toda la vertiente cantábrica, donde además pueden caer algunas lloviznas, preferentemente durante la segunda mitad del día.