los casos que saltan a los medios de comunicación son los más graves, pero no los más frecuentes. Hay otro tipo de acoso escolar más sutil que, de manera velada, puede acabar minando el ánimo con tanta o más fuerza que una paliza o un puñetazo en plena cara. Más allá de los golpes, del maltrato físico, están los motes hirientes, o las estrategias para apartarle a un compañero del grupo, ponerle mala fama o hacerle sentir que es invisible, que no es nadie.
Pero hay más, mucho más: el acosador puede tomarla con su víctima y esconderle los libros un día sí y otro también, o dejarle notas hirientes y amenazantes hacia su familia. El centro escolar es escenario de todo ello... ¿pero a qué llamamos bullying? Según explica la profesora Agueda Laraudogoitia, “para que exista tiene que darse un comportamiento que sea humillante, que sea repetido en el tiempo, dirigido siempre hacia la misma persona, y que se sienta más débil que su agresor, tanto física como psicológicamente. Es un abuso de poder y un trato humillante para una víctima que tiene problemas para defenderse”.
Por tanto, no puede equipararse a una pelea en el patio entre dos escolares con la misma fuerza emocional y física. Pero es tan sencillo, y establecer la linea divisoria entre el acoso y los problemas cotidianos de convivencia que suelen ocasionar más de un quebradero de cabeza en el día a día.
Los centros escolares están muy sensibilizados con el bullying, pero a veces supone una ardua tarea que no se ve correspondida. Con frecuencia, cuando todavía humean los rescoldos de un conflicto vuelve a surgir otro, condenando a los centros a una conflictividad permanente.
Fue en este contexto en el que las ikastolas conocieron el programa KiVA, que estaba funcionando con éxito en muchos países de Europa y, tras varias reuniones, surgió el acuerdo suscrito entre la asociación Ikastolen Elkartea y la Universidad de Finlandia, que está asesorando y apoyando en todo lo necesario a las cincuenta y dos ikastolas que han dado su visto bueno para implantar esta novedoso modelo a partir del próximo 9 de enero.