bilbao. "No estamos en contra de esa técnica sino de su mal uso para resolver un parto cuando no es necesaria", asegura Txanton Martinez-Astorquiza, jefe de Ginecología del hospital de Cruces y presidente de Perinatología de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO).
Usted critica reiteradamente que se practican demasiadas cesáreas.
Es una tendencia imparable y eso que Euskadi es la comunidad que menos tasa de cesáreas registra. Yo solo explico cómo podemos rebajarlas, que hay métodos, pero que hay que querer hacerlo. Predico por todos lados las bondades del parto natural y nuestros compañeros del resto de España nos dicen (con cariño) que los vascos somos muy talibanes porque siempre defendemos que hay que intentar el parto por vía vaginal. Especialmente en Cruces, que lucha mucho por este tipo de parto. De hecho, hemos sido reconocidos este año con el top 20 como mejor servicio de ginecología y obstetricia de España. Pero yo siempre digo que hay que ser honesto y modesto porque sabemos que cada hospital tiene que adaptar sus protocolos a su capacidad de asistencia. No es lo mismo actuar en el centro de una gran ciudad que en la isla de Hierro.
¿La demanda crece por el boom
Ese es uno de los factores que influye negativamente en el alto número de cesáreas. Igual que cuando Angelina Jolie dice que se ha hecho una mastectomia bilateral profiláctica y que se va a quitar los ovarios porque tiene antecedentes de cáncer. Esos anuncios aumentan el número de consultas de mujeres. Se cree que el parto mediante cesárea es igual que el natural y no es así. Yo no entro en si esas famosas tenían la necesidad de someterse a una cesárea o no, pero hacer cesáreas a demanda no nos parece bien.
Dicen que los médicos se protegen y se autodefienden de las demandas practicando más cesáreas.
Es que el parto vaginal tiene muchos enemigos. El primero son las demandas judiciales porque siempre que vamos a un juzgado por un mal resultado perinatal, es decir, por un nacimiento con algún problema, siempre preguntan por qué no se hizo una cesárea. Parece que la cesárea lo cura todo y no es así. Y después quizá sea responsabilidad de los propios médicos porque debido a esas eventuales demandas actuamos a la defensiva.
También hay razones sociales.
Sí porque la sociedad ha cambiado, y el número de partos que tienen las mujeres es bajo. Antes asistíamos a quintos o sextos partos que eran rapidísimos y ahora casi todas son primíparas porque la media de partos en Euskadi es muy pequeña. Todo esto condiciona que los partos sean más difíciles y se conviertan en partos de más riesgo.
Si el primer enemigo son las demandas, ¿el segundo sería la edad de las madres?
El patrón de embarazadas ha cambiado. Son más mayores y tienen más factores de riesgo. Y además también tienen menos partos, no hay que olvidar que el primero suele ser más difícil y el segundo ya es más sencillo. También es un motivo importante de cesáreas que haya más tasa de múltiples, embarazos gemelares, triples... porque mucha gente acude tarde a la maternidad, tiene problemas de infertilidad y hay que ayudarles con métodos de reproducción asistida.
La gente de la calle entiende que se asumen más riesgos con un parto natural y, sin embargo, parece que está equivocada.
En general, el parto vaginal es más inocuo y es el parto natural fisiológico por el que todos deberíamos nacer, si se puede. Otra cosa es que la cesárea deba ser una intervención de recurso para evitar ciertos problemas tanto de la madre como del feto. No estamos en contra de las cesáreas perse, pero por norma general hay que intentar que el parto sea vaginal que es la vía natural.
Además los costes económicos se disparan.
Sí, como soy gestor en mi hospital, me gusta hacer números porque es un dinero que pagamos todos. Y calculamos que el proceso de la cesárea cuesta el doble que un parto vaginal tanto por utilización de quirófanos, por recursos quirúrgicos, profesionales y días de ingreso. Si una mujer con un parto sin episiotomía se puede ir a casa al día siguiente, con una cesárea rondaría los cuatro días de estancia.
En Cruces también han apostado por técnicas que evitan cesáreas.
En Euskadi también hicimos un documento para dar a la oportunidad a las mujeres, con ciertas características y condiciones, de ser asistidas a los partos de nalgas por vía vaginal. Pero no solo eso, además en el hospital de Cruces somos pioneros de la versión cefálica externa, que provoca un cambio en la postura de los bebés que vienen de nalgas para lograr una colocación correcta en el canal del parto y un parto vaginal. Les damos la vuelta y les ponemos de cabeza. Si un 5% de partos vienen de nalgas lo convertimos en un 2,5%. Luchamos con todo lo que sabemos.